Corría diciembre del año 1983, cuando Raúl Alfonsín ascendía a la Presidencia de la Argentina, poniendo fin a la última dictadura “cívico-militar” y con ello, probablemente, a la etapa más oscura y angustiosa de la vida republicana del hermano pueblo.
En ese mismo año, Carlos Alberto García Moreno (Charly), el genio del rock latinoamericano, y con seguridad el más relevante, por lo menos por esta zona del planeta, compuso Los dinosaurios, canción dedicada a esa oprobiosa etapa de violación de derechos humanos, de desapariciones, de censura en la prensa, incluso en la música y de persecución al pensamiento no alineado a la dictadura.
En esta, recurriendo a metáforas, Charly llama dinosaurios a los dictadores, a los represores, a aquellos apalancados en el poder político usurpado al pueblo.
Charly, de manera nostálgica, recuerda a todos los desaparecidos durante la oscura etapa de la dictadura, cuando dice que los amigos de barrio, los cantores de radio, los que están en los diarios, pueden desaparecer. Pero al mismo tiempo, afirma que los dinosaurios van a desaparecer. Y claro, no hay mal que dure 100 años, ni cuerpo que lo aguante. Si hay algo cierto es que, tarde o temprano, los dictadores abandonan el poder.
Antes de compartir con ustedes la letra de la canción que motiva esta columna, pongan especial atención a este párrafo: “…Cuando el mundo tira para abajo es mejor no estar atado a nada, imaginen a los dinosaurios en la cama…”.
-Cuando el mundo tira para abajo (cuando el poder se acaba, cuando la vida se acaba)...
-Es mejor no estar atado a nada... (Es decir, conciencia limpia, sin remordimientos, sin víctimas, sin perseguidos, sin desaparecidos. El dinero, los bienes materiales, no se disfrutan desde la cárcel, ni el exilio. Ni tampoco se llevan al otro mundo)...
-Imaginen a los dinosaurios en la cama (imagínenlos sin poder, sin prebendas, como un frágil y común ser humano).
No digo más. Saquen ustedes sus propias conclusiones, amigos lectores. Cualquier parecido es producto de su imaginación, y de la de Charly.
El mundo da vueltas, y esta obra maestra, se adapta a todos aquellos lugares en los que mentes cortas creen que sus atropellos serán eternos.
Los dinosaurios
Letra y música: Charly García.
Los amigos del barrio pueden desaparecer, / los cantores de radio pueden desaparecer. / Los que están en los diarios pueden desaparecer, / la persona que amas puede desaparecer. / Los que están en el aire pueden desaparecer en el aire. / Los que están en la calle pueden desaparecer en la calle.
Los amigos del barrio pueden desaparecer, pero los dinosaurios van a desaparecer.
No estoy tranquilo, mi amor, hoy es sábado a la noche un amigo está en cana. / Oh, mi amor, desaparece el mundo. / Si los pesados, mi amor, llevan todo ese montón de equipaje en la mano. / Oh, mi amor, yo quiero estar liviano.
Cuando el mundo tira para abajo / es mejor no estar atado a nada, / imaginen a los dinosaurios en la cama. (O)