La Cárcel del Encuentro es el nuevo complejo de máxima seguridad y el Gobierno está decidido a que sea diferente a las cárceles vulnerables que ha tenido el país.
El ministro del Interior, John Reimberg, ha indicado esta semana que ni siquiera La Roca era una cárcel de máxima seguridad, sino de mediana seguridad y, como tal, será readecuada.
Durante esta semana de operación, el Gobierno ha dado algunas muestras de por qué la Cárcel del Encuentro debe ser considerada de máxima seguridad.
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Los reos se han rapado, han sido ubicados en celdas de hasta cuatro personas, y los reclusos han entrado solo con el mínimo vestuario.
Las visitas de los abogados no tendrán contacto con los reos, sino que se podrán comunicar por vitrales gruesos. Además, el economato, para comprar productos, no existirá.
Reimberg ha explicado que se evitarán las salidas de los reos por cuestiones médicas debido a que hay un centro de salud equipado y con doctores.
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Y las visitas de familiares tendrán un protocolo ajustado a la nueva realidad de esa cárcel ubicada en Juntas del Pacífico.
Una particularidad de esa cárcel es que está ubicada en un área declarada como zona de seguridad.
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Reimberg señaló que hay restricciones en el espacio aéreo y ni siquiera drones pueden volar sin autorización. Reimberg incluso anticipó que los medios de comunicación tampoco tienen aval para poner en funcionamiento drones en esa cárcel. “Serán bajados”, advirtió.
Reimberg, en una entrevista con EL UNIVERSO, manifestó que la zona de seguridad comprende algunos kilómetros a la redonda de la cárcel, aproximadamente dos, donde nadie puede construir y, aparte de eso, se cierra el espacio aéreo.
“Nadie puede sobrevolar, ni siquiera drones, helicópteros. Es importante porque por no haber hecho eso en el pasado es que usted tiene las casas pegadas a la Penitenciaría de Guayaquil”, dijo.
Mencionó que hoy a la cárcel no llega la cobertura de internet y eso pretenden que se mantenga. La cárcel cuenta con los equipos necesarios para el bloqueo.
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“Hemos sacado las fotos satelitales alrededor de la cárcel para poder revisar que no haya nuevas construcciones. Ese monitoreo es constante. Para nosotros es fundamental, porque van a intentar de alguna forma tratar de llegar, por más que es imposible. Por eso hemos implementado estos controles, por eso tenemos los diferentes anillos de seguridad”, indicó.
A diferencia de las cárceles de Guayaquil que quedan al pie de la vía a Daule, la Cárcel del Encuentro está lejos de los centros urbanos. Juntas del Pacífico, el poblado más cercano, está a unos 5 km de la cárcel.
En la carretera que conduce hacia la cárcel hay controles militares que impiden el acceso a personas o carros que no están autorizados. (I)
