A pocos días para el regreso a las aulas, en medio de una ola de hechos violentos perpetrados por bandas criminales que azotan a Guayaquil, en el Puerto Principal y en cantones cercanos muchos planteles particulares han contactado a empresas de seguridad para cotizar un contrato de guardianía privada y la instalación de más cámaras.

John Garaycoa, director de la compañía de seguridad Mac Security, comenta que ha sido consultado por algunos colegios en las últimas semanas, que están interesados en contratar no solo guardias privados, sino también en la instalación de cámaras.

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Detalla que el costo va desde los $ 1.000 mensuales por cada guardia armado que permanezca 8 horas en el plantel. Si la vigilancia es por 24 horas, serían $ 3.000 por guardia, señala Garaycoa.

Él dice que muchos planteles van a contratar un guardia para que esté en la puerta de ingreso las ocho horas de clases, es decir, desde las 07:00, cuando llegan los alumnos, hasta las 15:00 cuando ya todos se van, en el caso de instituciones que solo tienen jornada diurna.

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El experto comenta que incluso un plantel ubicado en Urdesa estaba cotizando hace poco algún tipo de arco para detectar metales con la intención de descubrir si algún estudiante lleva un arma de fuego o de otro tipo a la unidad educativa.

Colegio particular se acoge a la virtualidad por supuestas amenazas a través de redes sociales

Hacer requisas aleatorias en los ingresos además de los detectores de armas son algunas ideas que se barajan por ahora.

Otros planteles incluso han ido más allá alistando protocolos y haciendo simulacros para que los estudiantes sepan qué hacer y dónde acudir en caso de que alguien armado entre al colegio para cometer algún acto delictivo.

El Liceo Panamericano, sede Centenario, cuenta por ahora con 56 cámaras y tres guardias armados.  FOTO JORGE GUZMÁN  Foto: El Universo

Fabrizio Robayo, inspector general y encargado de la comisión de seguridad y salud del Liceo Panamericano, cuenta que ya los estudiantes saben cómo actuar porque tienen algún tiempo trabajando en el protocolo de repliegue. Se activa una alarma especial, señala el funcionario, y añade que cada maestro tiene una radio de comunicación consigo.

Él menciona que en la sede de Samborondón hay unas 70 cámaras (en cada aula, pasillos y exteriores), que se está contratando a más guardias para este año lectivo que empieza el lunes 24 de abril y que esta semana se instalará un cerco eléctrico en el perímetro de la institución educativa, donde ya hay 10 cámaras.

Porte de armas no se permitirá dentro de los planteles educativos

También están trabajando con cada maestro (son más de 150 en la sede de Samborondón). Cada uno de ellos ha descargado la aplicación del ECU911 en sus celulares y esta ha sido configurada para alertar de forma silenciosa de cualquier incidente y que el sistema de monitoreo de emergencia pueda rastrear el teléfono.

Entre los protocolos de seguridad del plantel de 1.400 estudiantes se determina también quiénes pueden visitar el colegio, solo con previa cita, y que en caso de haber estudiantes en el plantel no se puede tomar fotografías.

En la sede del Centenario, este colegio tiene tres guardias armados y al menos 56 cámaras de seguridad.

El colegio Cristóbal Colon, ubicado en el sur de Guayaquil, también cuenta con guardianía privada.  FOTO JORGE GUZMÁN  Foto: El Universo

Los directivos de ese plantel al igual que el colegio Cristóbal Colón están analizando contratar más guardias para el año lectivo. Muchos planteles privados ya han empezado clases anticipadamente esta semana aunque, según el calendario oficial, el inicio del año escolar 2023-2024 en la Costa será el próximo 24 de abril.

Los guardias, según anunció la ministra del ramo, María Brown, la semana anterior, deberán permanecer afuera de los colegios con las armas que porten. Esto a propósito del Decreto Presidencial 707, que permite el porte y tenencia de armas de uso civil,

La funcionaria explicó que de manera diferenciada se regulará el rol que tiene la seguridad privada en los colegios, en cuyo caso se aplicará lo que disponga la autoridad competente, pero fuera del establecimiento educativo para evitar que los estudiantes estén en peligro.

La Autoridad de Tránsito y Vigilancia (ATV) de Samborondón, el viernes pasado, realizó una reunión con varios directivos de planteles, precisamente para alistar protocolos frente a situaciones violentas en el ámbito educativo. (I)