Un megaoperativo coordinado por el Municipio de Quito, en conjunto con la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas, se desarrolló en la noche del viernes y la madrugada de este sábado en zonas críticas del Distrito Metropolitano.
El despliegue, que incluyó más de 550 funcionarios y uniformados, dio como resultado trece establecimientos clausurados, catorce ciudadanos retenidos para procesos de deportación y la incautación de armas blancas y licor sin registro sanitario.
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La intervención se concentró en los sectores de Eugenio Espejo, La Delicia y Quitumbe, con un enfoque en centros de tolerancia y locales comerciales. De los veinte establecimientos inspeccionados, nueve eran centros de tolerancia.
Las clausuras fueron ejecutadas por la Comisaría (10) y la Agencia Metropolitana de Control (3). Además, se registró la detención de una persona.
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Durante la operación, las Fuerzas Armadas realizaron controles de armas para prevenir el porte ilegal, mientras que la Agencia Metropolitana de Tránsito efectuó revisiones vehiculares y controles de movilidad en los puntos intervenidos.
“Cuando sumamos fuerzas, Quito gana. Hoy demostramos que la coordinación entre Municipio, Policía y Fuerzas Armadas es clave para devolver orden y confianza a la ciudad”, señaló Carolina Andrade, secretaria de Seguridad y Gestión de Riesgos.
El coronel Carlos Fuertes, jefe del distrito Eugenio Espejo, también destacó el trabajo conjunto: “La seguridad ciudadana requiere unidad, planificación y acción permanente. Operativos como este son un mensaje claro para quienes insisten en vulnerar el orden en la capital”.
Este operativo se enmarca en una estrategia permanente del Municipio de Quito para reducir riesgos, combatir actividades ilícitas y recuperar espacios públicos, especialmente en zonas de alta conflictividad. (I)