A riesgo de perder su vida, Víctor R., de 37 años, logró escapar de sus secuestradores, quienes lo tenían retenido por la vía a Cañalito del cantón Quevedo, en la provincia de Los Ríos.
El hombre contó que fue raptado el 28 de mayo. Las circunstancias del secuestro no han sido informadas por la Policía.
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Mientras Víctor R. estaba en cautiverio, aprovechó un descuido de los delincuentes y logró zafar las amarras de sus manos para después salir en precipitada carrera hacia el sector Baldramina Alta, donde pidió ayuda a las personas que se encontraban por el lugar.
Tras ser auxiliado se dio aviso a la Policía. Los agentes realizaron intervenciones, pero sin lograr ubicar a los secuestradores.
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Víctor R., después de cuatro días de cautiverio, pudo encontrarse con sus familiares, entre ellos su hermano, un sargento primero de la Policía en servicio activo.
Un abogado y su hermano habrían secuestrado a su padre, pedían $ 10.000 por su rescate
En este mismo sector de Quevedo, Cañalito, dos comerciantes de legumbres fueron víctimas de secuestro y asalto cuando se movilizaban por la hacienda La Maravilla.
El hecho ocurrió la mañana del sábado. Wilman P., de 38 años, y su esposa, Carmen N., se movilizaban en su camión de color blanco cuando fueron sorprendidos por delincuentes.
Los pillos los obligaron a parar la marcha del camión y luego a bajar a la fuerza. La pareja estuvo retenida por varias horas y luego fue llevada a una hacienda, donde los dejaron maniatados. Los asaltantes se llevaron el camión con los productos que transportaban.
La Policía fue alertada del hecho por un guardia de una hacienda cercana, quien en sus rondas halló en las inmediaciones de la propiedad privada productos de consumo masivo; esto le pareció sospechoso y no dudó en dar aviso a la institución del orden. Los agentes llegaron al sitio y lograron por medio de operativos ubicar a las víctimas y poco después el camión, que estaba entre las malezas en otro sector.
Los habitantes del sector Cañalito cuentan que esta zona ha sido escenario de múltiples secuestros. Aseguran que es hora de que la Policía construya una UPC para evitar estos delitos, debido a que es usada por comerciantes agrícolas, ganaderos y de consumo masivo que se han convertido en víctimas de secuestros y extorsiones.