Existe temor en los habitantes de una ciudadela privada ubicada en la vía a Salitre, en Guayas, luego del doble asesinato de dos residentes la madrugada de este viernes, 4 de diciembre.
Los atacantes ingresaron a bordo de dos camionetas, vestidos con uniformes similares a los de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional.
Para ingresar a la zona residencial, golpearon a los guardias y tumbaron las plumas que impiden el acceso en la garita.
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La mañana de este viernes se pudo evidenciar a un hombre reparando dicha estructura, que sirve como una medida de seguridad.
Junto a él estaban algunos guardias supervisando los alrededores de la urbanización.
El crimen ocurrió cerca de las 02:30 y los disparos fueron escuchados por todos los habitantes de las viviendas.
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No se podía ver a muchos usuarios caminado por la zona. Y aunque algunos residentes se negaban a dar entrevistas, hubo otros que sí se atrevieron a relatar el momento del crimen.
“Escuchamos los disparos. Parecía una ametralladora, porque se escuchó una ráfaga de disparos”, relató un habitante de la ciudadela.
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El hombre contó cómo vivió su familia el momento de la balacera.
“En ese momento yo no salí de la casa hasta que ya vimos en redes sociales la noticia. Uno ya queda con temor para salir, porque uno viene a vivir a una ciudadela supuestamente segura, pero es peor”, comentó el residente.
El ciudadano había salido a realizar unas compras esta mañana. Aseguró que antes de salir esperó unas horas hasta que todo se calme.
“Realmente aquí no es inseguro, pero es que esto está pasando en todo el Ecuador”, opinó el vecino.
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“Gran responsabilidad tienen los administradores de las urbanizaciones y los dueños de casas que le alquilan a quien les dé billete”, manifestó otra residente, aludiendo a que la casa donde vivían las víctimas era arrendada.
Según testimonios preliminares, los presuntos sicarios llegaron con fusiles en mano y simularon un operativo, un hecho que inicialmente confundió a los vigilantes del conjunto residencial.
Los hombres sometieron a los guardias, a quienes golpearon y posteriormente amarraron de manos y pies con sacos.
El personal de seguridad informó que sus compañeros afectados por el ataque se encuentran estables y fueron retirados del lugar por la Policía durante la madrugada.
Minutos después del suceso, agentes policiales y equipos de Criminalística arribaron al lugar para recoger los indicios y comenzar las pericias.
Las grabaciones de seguridad obtenidas desde la garita ya están en manos de la Policía Nacional para avanzar con las investigaciones.
Hasta el momento, los agentes policiales del distrito Daule no se han pronunciado sobre las causas del ataque ni sobre la identidad de las víctimas. (I)
