La actual pugna entre la Asamblea Nacional y el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS) por la destitución de consejeros y la titularización de sus suplentes no solo pasa por el marco constitucional o penal, sino que se ha vuelto incluso personal, ya que los presidentes de los dos entes, Virgilio Saquicela y Hernán Ulloa, respectivamente, se han enfrascado en una serie de acusaciones y epítetos que así lo demuestran.