La Comisión Nacional Anticorrupción (CNA) remitió una carta a la Vicepresidencia de la República alertando de presuntas irregularidades en el sistema de salud público. En principio, la institución aclaró que los temas sobre salud no tienen relación con las funciones asignadas a María José Pinto por Daniel Noboa, desconociendo el Decreto 222 del 18 de noviembre pasado, aunque luego ella reconoció que la respuesta estuvo mal hecha. En diálogo con EL UNIVERSO, Germán Rodas, coordinador de la CNA, repasa las novedades que se han detectado en este sector.
¿Qué ha identificado la Comisión en el sistema de salud pública?
La carta tiene un expediente de 78 páginas con todas las denuncias de la Comisión Nacional Anticorrupción para que conozca la vicepresidenta, que está encargada del Ministerio de Salud, sobre la existencia de 172 proveedores que, en los últimos años, desde el 2020 hasta el 2025, mediante procesos irregulares, fraudulentos, convenios de pago, etcétera, han perjudicado al país en un monto de alrededor de 240 millones de dólares. Y en la carta, en la segunda parte, le señalábamos nuestra preocupación por las gestiones que se vienen haciendo en la perspectiva de contratar a HealthBird para el agendamiento de citas, y le decíamos que, como están en juego $ 37 millones, había que poner todas las precauciones para que no se convierta en la pérdida del dinero de los ecuatorianos. Ese es el contenido de la carta. A lo que aspirábamos era que la vicepresidenta nos diga que le van a servir los listados enviados de esas personas inescrupulosas y que ella, esperábamos lo diga, se comprometía a precautelar también que esta contratación con esta empresa, que es medio fantasma, no ocurra, para cuidar dinero de los ecuatorianos y para no afectarnos como ocurrió con el caso Progen.
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¿Desde cuándo y a qué autoridades se denunció esto?
Este mismo material fue entregado el 4 de agosto de este año tanto al doctor Édgar Lama, expresidente del Consejo Directivo del IESS, como al exministro de Salud Jimmy Martin, pero parece que no les sirvió de mucho porque estaban preocupados de otros temas. Evidentemente, creíamos que la misma vicepresidenta podía tomar riendas en el asunto, tanto que tiene tres funciones fundamentales: ser vicepresidenta, ser ministra de Salud y ser integrante del Comité de Salud.
¿Usted confía en que haya una respuesta por parte de la Vicepresidencia o del Ministerio de Salud sobre estas alertas?
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Esperemos que sí, porque la primera respuesta nos dejó muy preocupados, pero ahora ha quedado claro que contestaron, a nuestra forma de ver, un ‘disparate’, lo ha dicho ella (María José Pinto) misma. Esperemos que en los próximos días se atienda a esta documentación que ciertamente es una alerta y una constatación de cómo en el país se están manejando las cosas, desde hace tiempo, con estos proveedores que son verdaderas mafias, núcleos organizados que atracan recursos de los ecuatorianos. Esperemos que se actúe para dejar en claro cuál es esta expectativa de la contratación de la empresa HealthBird, porque de lo que sí sabemos es que no está capacitada para hacer estos agendamientos, para dar una buena atención, y no está capacitada porque no tiene ninguna experiencia en la materia y porque también ha tenido serios inconvenientes, debido a que lo que en el fondo es un bróker de seguros, de nada más".
Es decir, ¿ustedes están haciendo un llamado al Gobierno para que frene la contratación con la empresa HealthBird?
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Nosotros estamos alertando para que se busquen todas las garantías para que funcione un sistema adecuado. No nos parece que con esta empresa sea lo mejor, no nos parece, y sobre todo, porque las cosas han sido precipitadas. Fíjese usted que esto se aprobó en el Consejo Directivo del IESS con el voto salvado de uno de los vocales, como la vocal de los empresarios y con el doble voto del Dr. Lama, que estaba desesperado porque esto se apruebe. Entonces, nos preocupa porque en la administración del Dr. Lama, lo único que se ha evidenciado es la desinstitucionalización del IESS y un manejo inadecuado de esa entidad.
Bajo su criterio, ¿qué debería hacer el Gobierno para atender esta crisis de salud?
Es importante comprender que el tema de la salud no puede ser manejado en términos políticos, ni como precampañas electorales ni como objetivos mediáticos, sino que hay que dar seriedad a este asunto. Hay que cumplir con las deudas que se tienen y los compromisos por parte del Estado con el IESS, por ejemplo, y rodearse de gente que no sea improvisada en el manejo de la cosa hospitalaria, de medicación, rodearse de gente con trayectoria y con honradez. No se trata de que hagan aspaviento de sus funciones, sino que cumplan con los requerimientos del país para modificar un sistema tan anacrónico que demuestra que ni se compra con precios adecuados, objetivos, sincerando las ofertas, de que no se compren a dedo los medicamentos, que no se privilegie a ciertos sectores, que las derivaciones a las clínicas sean de manera adecuada y procedente. Es decir, se necesitan tres cosas: tener una amplia visión de lo que es la salud pública para que no solamente sea una salud de carácter curativa, sino también preventiva; segundo, que no haya improvisación en la administración de las personas encargadas en los temas de salud; y tercero, un compromiso con la vida de los ecuatorianos para manejar con honestidad y sin corrupción los recursos de todos los ecuatorianos. Exigimos transparencia para estos temas.
¿Y todo esto no se ha cumplido hasta el momento?
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Así es, nos parece que no se han cumplido. Hay improvisación, no hay una visión de salud pública y es evidente que ha habido irregularidades que son preocupantes. De allí que las alertas que nosotros ponemos es justamente con ese afán, nada más, y que lo seguiremos haciendo al margen de que respondan o no, porque la respuesta no es a la Comisión Nacional Anticorrupción sino al pueblo ecuatoriano.
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