Lyudmila Braun, de 76 años, jamás imaginó que la muerte la estaría esperando a cinco cuadras de su casa.
El golpe que le dio un panel solar que salió disparado de un tejado fue certero e inmediato.
Esto ocurrió el pasado lunes 13 de octubre, cuando había una alerta de viento vigente debido al temporal en el lado costero de Estados Unidos.
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De acuerdo con The New York Post, el Servicio Meteorológico Nacional advirtió sobre vientos de entre 32 y 48 km/h y ráfagas de hasta 72 km/h que podrían “provocar la proyección de escombros” y “convertir objetos sueltos en proyectiles”.
Eso fue justamente lo que le pasó a Lyudmila, quien vivió en ese momento una trágica coincidencia con el mal clima y su salida por el vecindario.
El panel era de grandes dimensiones, dos metros de largo, y estaba instalado en un parqueadero al aire libre en Ocean Parkway, cerca de Brigthon Beach, en Nueva York.
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Dicho panel salió disparado y fue arrastrado a lo largo de seis metros, de acuerdo con la información del Departamento de Policía de Nueva York y el Departamento de Edificios de la ciudad, recogidos por The New York Post.
Cuando sucedió esto, Lyudmila estaba pasando y fue golpeada hasta la inconciencia por el gran aparato.
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Cayó súbitamente el suelo, fue llevada a un centro médico y ahí solo se confirmó su muerte.
Por esa razón, la forma en que murió se considera un accidente muy extraño; mientras tanto el caso está en investigaciones.
Además, por precaución se cerró una de las entradas a la cercana estación de tren elevada Ocean Parkway Q “por seguridad pública” durante la tormenta.
De ahí que se haya declarado en emergencia a la ciudad de Nueva York, Long Island y Westchester desde el domingo anterior mientras pasa este temporal. (I)
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