Italia ha puesto en marcha un dispositivo de máxima seguridad ante el funeral del papa Francisco que se celebrará el próximo sábado en la plaza de San Pedro del Vaticano, donde se esperan más de 200.000 fieles y numerosos jefes de Estado y de Gobierno, por lo que se desplegarán en Roma 4.000 policías y se extenderá una zona de exclusión aérea.