Por diversas causas y maneras, hay personajes que se han vuelto conocidos en la historia por la crueldad con la que cometieron crímenes. Asesinos cuyo accionar genera repudio, pero que suelen terminar admirados por ciertas personas que gustan de lo macabro.
Erzsébet Báthory, según la leyenda, se bañaba en la sangre de sus víctimas creyendo que eso le daría juventud, recuerda El Confidencial. Otros más mediáticos, como Charles Manson, captaron la mente de decenas de personas para terminar con la vida de otras.
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La cárcel con ‘muros del terror’ donde iban los condenados por practicar sexo oral y ser ‘vagos’
Aquí les dejamos cinco de estos personajes:
1) El vampiro de Düsseldorf
El alemán Peter Kürten violaba a sus víctimas y las golpeaba con un martillo. Luego las desmembraba y mutilaba para beber su sangre, de ahí el sobrenombre. Ni los animales se salvaban de su desordenado accionar. Se conoce que su padre era alcohólico y maltratador. En la década de 1920 causó terror en Düsseldorf.
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2) El Doctor Muerte
El médico británico Harold Shipman se acercaba especialmente a adultos mayores y les inyectaba morfina. A las familias de sus víctimas les decía que la muerte había sido natural, pero luego de investigarse varios casos similares, se descubrió su culpabilidad. Se suicidó en prisión en 2004.
3) El Payaso Asesino
John Wayne Gacy, quien se hacía llamar Pogo, asesinó al menos una treintena de personas y las enterró cerca de su casa. Las torturaba, sodomizaba y estrangulaba. Hasta su ejecución, en 1994, se negó a decir dónde había sepultado a todas sus víctimas.
4) Charles Manson
Sacudió Estados Unidos en la década de 1960. “Su capacidad de oratoria y su carisma lo convirtieron en el líder de una ‘familia’ que vivía al margen de la sociedad. La noche del 8 al 9 de agosto del 69, un grupo de personas de su ‘familia’ acabó con la vida de la actriz Sharon Tate, que en aquel momento se encontraba embarazada de ocho meses, y sus cuatro acompañantes”, se recuerda en la publicación.
5) El asesino del zodiaco
También en Estados Unidos, aunque con su verdadera identidad desconocida, este hombre de unos 30 años mató al menos a siete personas, aunque se presume que fueron muchas más. Escribió cartas a periódicos para amenazar con asesinar si no se las publicaban. (I)