Ecuador entra a la época seca del 2025 y varias instituciones del Estado ponen a punto planes para enfrentar sus efectos.
En 2024 hubo casi 6.000 incendios forestales y las provincias mayormente afectadas fueron Loja, Azuay, Pichincha y El Oro.
Jorge Carrillo, secretario nacional de Riesgos, responde a un cuestionario remitido por este Diario sobre las acciones que se implementarán.
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¿En 2024 cuántos incendios forestales hubo?
5.833 incendios forestales a nivel nacional.
¿Cuáles fueron los lugares mayormente afectados?
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Las provincias de Loja, Azuay, Pichincha y El Oro.
¿Cuántas hectáreas se quemaron?
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En el 2024 se quemaron un total de 83.406,54 hectáreas de cobertura vegetal
¿Qué acciones se han implementado para recuperar esas áreas?
En respuesta a los incendios forestales de alto impacto registrados en Ecuador, la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR) ha impulsado acciones de recuperación a través de sus coordinaciones zonales, articulando esfuerzos con actores locales y nacionales.
Junto a los comités comunitarios de Gestión de Riesgos se han ejecutado jornadas de reforestación con especies nativas priorizando áreas críticas afectadas por el fuego.
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Paralelamente, estos comités han recibido capacitaciones especializadas en prevención y respuesta ante incendios y se avanza en la distribución de kits de respuesta rápida para fortalecer sus capacidades operativas.
Estas iniciativas se han reforzado con el apoyo de voluntarios de Defensa Civil, quienes participan activamente en las campañas de reforestación lideradas por el Ministerio del Ambiente, asegurando una rehabilitación ecológica técnicamente guiada.
Adicionalmente, la SNGR ha establecido, a través de sus zonales, formas de articulación con los gobiernos locales para coordinar planes de reforestación a mediano plazo.
Este enfoque colaborativo no solo busca recuperar la cobertura vegetal perdida, sino también reducir vulnerabilidades futuras.
¿Cuáles son los lineamientos para la época seca 2025?
Los riesgos de la época seca son sequías, incendios forestales y déficit hídrico.
La Subsecretaría de Reducción de Riesgos ha desarrollado recomendaciones para la ciudadanía, comités comunitarios de Gestión de Riesgos y Gobiernos Autónomos Descentralizados (GAD).
Para la población, la guía técnica promueve medidas prácticas de autoprotección como almacenamiento de agua, prevención de incendios y coordinación con autoridades locales.
Para los comités comunitarios se ha decido que reciban capacitaciones continuas mediante las coordinaciones zonales, fortaleciendo sus habilidades en identificación de riesgos, alerta temprana y respuesta articulada, adaptadas a cada territorio.
Por su parte, la guía para GAD establece acciones específicas por nivel de gobierno, desde la gestión eficiente del agua hasta la protección de áreas vulnerables a incendios con enfoque en corresponsabilidad pública.
Estas acciones, fundamentadas en criterios técnicos avalados por estudios de vulnerabilidad climática y análisis de riesgos sectoriales, buscan fortalecer de manera integral la resiliencia territorial y comunitaria frente a los efectos crecientes de la variabilidad climática en Ecuador, particularmente en zonas expuestas a sequías recurrentes, estrés hídrico y degradación de ecosistemas.
¿Qué actividades están desarrollando con la academia, con organismos técnico-científicos y otras entidades estatales?
La coordinación interinstitucional entre la Subsecretaría Nacional de Gestión de Riesgos y el Ministerio del Ambiente es un eje fundamental para abordar de manera integral las amenazas asociadas a la época seca.
Ambas instituciones, al compartir competencias complementarias en prevención y mitigación, han alineado sus estrategias bajo un marco técnico unificado, evitando duplicidad de esfuerzos y optimizando recursos.
Este trabajo se materializa con la ciudadanía, mediante guías prácticas de autoprotección, comités comunitarios de Gestión de Riesgos, con capacitaciones en identificación temprana de riesgos, y GAD, a través de directrices para la gestión territorial resiliente.
Estas acciones convergentes se consolidarán en la Campaña Nacional de Prevención de Época Seca, cuyo lanzamiento está previsto para julio de 2025.
La campaña, busca posicionar un mensaje unificado sobre medidas preventivas y de preparación que busca no solo reducir impactos inmediatos, sino también construir capacidades locales sostenibles, asegurando que las comunidades y autoridades estén mejor preparadas para enfrentar futuros eventos extremos.
¿De qué manera van a prevenir y reducir los incendios forestales en 2025?
Para prevenir y reducir los incendios forestales en 2025, se implementará una estrategia integral basada en tres pilares: prevención comunitaria, fortalecimiento institucional y manejo sostenible del territorio.
Primero, se ampliarán las capacitaciones a comités comunitarios de Gestión de Riesgos en identificación de focos de calor, uso de mecanismos de alerta temprana, complementadas con la aplicación de planes de evacuación.
Paralelamente, se distribuirá la guía técnica ciudadana con recomendaciones prácticas, como por ejemplo, eliminación segura de residuos inflamables, cosecha de agua, y se promoverán campañas de sensibilización mediante las plataformas en línea gubernamentales y las ferias ciudadanas de gestión integral de riesgos.
En el ámbito institucional, se exhortará a los GAD provinciales, municipales y parroquiales, a implementar acciones integrales de prevención y preparación ante incendios forestales, fortaleciendo capacidades locales mediante equipamiento y formación de brigadas, promoviendo prácticas sostenibles como franjas cortafuegos y reforestación con especies nativas.
Además ejecutando obras de conservación hídrica y forestal para mitigar la degradación del suelo e incorporando criterios de riesgo en la planificación territorial para reducir la exposición de poblaciones vulnerables.
Estas medidas, articuladas con la normativa nacional de gestión de riesgos, incluirán sistemas de monitoreo continuo y participación comunitaria, asegurando una respuesta coordinada y adaptada a las realidades locales para minimizar impactos durante la época seca.
¿Cuándo empezaría la época seca?
En Ecuador, en la región Costa la época seca ocurre entre junio y noviembre, en la región Sierra el primer periodo seco, más pronunciado, va de junio a septiembre, mientras que otro periodo menos intenso ocurre de diciembre a enero.
En la región Amazonía, aunque la región presenta lluvias durante todo el año, los mínimos de precipitación, y por tanto el periodo más seco, ocurren en agosto y septiembre.
En general, la época seca empieza en junio, especialmente marcada en las regiones Costa y Sierra.
¿Qué zonas son las más propicias para incendios forestales?
En función de la información de áreas susceptibles a incendios forestales serían las provincias de Carchi, Imbabura, Manabí, Pichincha, Cotopaxi, Chimborazo, Cañar, Loja, Azuay, El Oro y Guayas. (I)
