Un viaje en el tiempo. Un reencuentro con personajes y momentos que hicieron historia. Una sorpresa, un dato olvidado que siglos después nos maravilla. Esos son los museos de Quito, que en estas fiestas de la capital abren sus puertas e invitan a propios y extraños a un viaje en el tiempo que nos permita comprender buena parte de lo que ahora somos.