En la audiencia de flagrancia, en la que se dictó prisión preventiva y el inicio de la instrucción fiscal por 30 días a los cuatro implicados en el presunto delito de femicidio en contra de la estudiante de la Universidad Técnica de Ambato (UTA) Allison A. P. (23), se conocieron detalles de la actuación de los ahora detenidos.
El hecho se registró en la madrugada del domingo 23 de noviembre en el barrio Ferroviario, cantón Cevallos, en el sur de Tungurahua. Ahí se detuvo a Johan M. V. (18), Steven P. D. (21), Anderson M. V. (25) y Ronald P. G. (18).
La muerte de la joven, oriunda de Tena, provincia de Napo, que cursaba Medicina Veterinaria, causó indignación no solo en la provincia amazónica, sino también en Tungurahua, por la forma como terminaron con la vida de la muchacha.
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Según la investigación, Johan Santiago M. V. habría insistido para que la víctima acudiera a Cevallos, gestionando incluso su traslado en taxi.
En el lugar, los involucrados habrían consumido alcohol, cocaína y éxtasis. Tras quedarse la víctima dormida, los procesados presuntamente intentaron agredirla sexualmente y luego la habrían asfixiado, para después desmembrarla parcialmente, dice el reporte de la Fiscalía.
Según las investigaciones, se habría intentado ocultar (el cuerpo de la víctima) porque se lo encontró debajo de un colchón y encima estuvo recostado uno de los aprehendidos.
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Además, se pretendió eliminar evidencias, porque los presuntos implicados limpiaron la escena, se cambiaron de ropa y cubrieron el cuerpo con un colchón.
También fue determinante la versión de la madre de uno de los procesados, quien alertó al ECU911 luego de que su hijo le dijera que “había hecho algo malo”.
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Informe pericial
En la audiencia se adjuntó el informe pericial de reconocimiento del lugar de los hechos y evidencias como prendas de vestir con máculas de sangre, un arma blanca y un mazo de madera con rastros hemáticos, cuatro teléfonos móviles, botellas de licor y piezas de consumo de drogas (pipas artesanales).
Familiares de la joven llegaron al cantón Quero, donde se realizó la audiencia de flagrancia, y entre llantos y lamentaciones pidieron justicia y que el hecho no quede en la impunidad.
“El pedido es que se haga justicia, según las investigaciones, se presume que la asfixiaron, luego la estrangularon. Ella sufrió mucho. La han querido degollar, porque ahí están las muestras. Es inhumano, parece que quisieron desaparecer en pedazos a mi sobrina”, manifestó Marcial Poveda, tío de la víctima.
