Babahoyo, Los Ríos
Gabriela Garaicoa asegura que tiene su corazón partido en dos. Su hijo Javier Daniel Buenaire Garaicoa, de 22 años, fue asesinado durante un altercado por su padre de crianza.
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“Era su hijo, lo crio desde que tenía dos añitos, hasta le dio el apellido”, dijo mientras secaba sus lágrimas y relabata lo ocurrido la noche del sábado en su casa, ubicada en la calle Bolívar y Último Callejón, en Babahoyo.
Javier Daniel tenía problemas de adicción a las drogas y esto habría sido, al parecer, el detonante de la riña que terminó en muerte.
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Según Gabriela, su hijo Javier Daniel, además de consumir drogas, se dedicaba a “llevarse lo ajeno”.
La tarde del sábado le dijo que le prestara 30 dólares para poder completar y pagar el arriendo.
Al no tener una respuesta positiva de su madre, Javier empezó a enojarse.
Ya en la noche, con drogas y alcohol en la ‘cabeza’ mientras estaban en casa, habría empezado a recriminarle por situaciones pasadas.
Javier, según Gabriela, la insultó y trató de golpearla. No conforme con eso, atacó a su hermano menor de 15 años, que tiene problemas de discapacidad.
Su esposo, Danny Darío, habría intervenido y tratado de tranquilizar a Javier, pero nada de esto funcionó.
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“Estaba como endiablado: mordió el brazo a su padre, casi le saca un pedazo de piel, no entendía razón alguna. Mi esposo no lo mató intencionalmente; es más, cuando lo llevaron al hospital, ni siquiera pensamos que la herida era de gravedad. Yo me iba a un paso, pero llegó la policía, me detuvo y ahí me informaron de su muerte”, contó Gabriela.
Ella dijo que, mientras su esposo forcejeaba con su hijo, él habría agarrado un cuchillo para defenderse y accidentalmente terminó apuñalándolo.
El reporte de la Policía señala que la herida fue en la región del flanco lado derecho (zona donde está ubicado el colon, un extremo inferior del riñón derecho y el intestino delgado) y, pese a que fue llevado en una tricimoto hasta el hospital, él falleció mientras le realizaban una cirugía.
La Policía detuvo a su madre para investigaciones. Gabriela indicó que ella no mató a su hijo; además dio a conocer que frecuentemente era víctima de maltrato de su primogénito, a quien ya había denunciado.
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“Una vez me golpeó, me desgarró la blusa, me dejó con los pechos expuestos y luego me amarró”, relató Gabriela, quien precisó que, pese a todos los problemas que tenía, ella amaba a su hijo, quien desde adolescente era adicto a las drogas y eso le “desgració la vida”.
La Policía realiza las investigaciones para localizar a Danny Darío, padre de Javier, quien se escapó luego del hecho.
Luego de la autopsia, el cuerpo de Javier Daniel iba a ser llevado a Santo Domingo para su sepelio. (I)