En el barrio Techo Propio, en la parroquia urbana Pishilata, en el oriente de Ambato, los pobladores tienen temor a hablar de manera abierta sobre la seguridad en la zona.

Bajo el anonimato, aseguraron que hay personas dedicadas a actividades ilícitas en la zona.

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Hasta este barrio, en la mañana de este viernes, 21 de noviembre, se dirigió un contingente de las Fuerzas Armadas y de la subzona de la Policía Nacional de Tungurahua.

Con esta intervención se deshabilitaron cámaras de video que estaban colocadas en los postes de alumbrado público y que, según la gobernadora de Tungurahua, Daniela Llerena, servirían para alertar a los grupos delictivos de los operativos contra la delincuencia.

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La labor tuvo el apoyo de personal de la Empresa Eléctrica Ambato.

Justo al ingreso a Techo Propio, en la avenida Albert Einstein, se ubicó la primera de las quince cámaras que se desmontaron.

Una habitante de la zona expuso su temor por personas extranjeras que han llegado a radicarse en la zona y que tendrían vínculos con personas de mala reputación.

Añadió prefiere atender su negocio con las puertas bajo llave y para mayor seguridad puso rejas. “Porque ni los de aquí estamos libres de sus fechorías”, aclaró.

Cerca de Techo Propio, en la calle Catahuango, de la parroquia Pishilata, en varias ocasiones se han encontrado cadáveres abandonados en los terrenos. El último fue encontrado el pasado 21 de octubre, con heridas de arma de fuego y arma blanca.

Mapeo identificó cámaras

“Se hizo un mapeo y se identificaron cámaras de seguridad que no pertenecen al ECU 911 ni se encuentran enlazadas; por esa razón, con el eje de seguridad se trabaja para identificar el propósito de los dispositivos”, aseveró Llerena.

Según autoridades, las cámaras situadas en espacios públicos estarían siendo mal utilizadas por grupos delictivos asentados en la zona.

Los vecinos de Techo Propio vieron con agrado el operativo.

Solicitaron que se ponga en funcionamiento la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) que existe en el sector, a fin de tener mayor control de los problemas de delincuencia. (I)