Un supuesto centro de rehabilitación fue clausurado la tarde del martes 20 de mayo en el sector de Calderón, en el norte de Quito, tras denuncias ciudadanas que alertaron de supuestos casos de maltrato físico y psicológico a los internos.
La Agencia Metropolitana de Control (AMC) atendió la emergencia y, al llegar al lugar, constató la presencia de 50 adultos y 4 menores de edad en condiciones de hacinamiento.
Los espacios del centro estaban distribuidos en varios departamentos improvisados alrededor de una cancha deportiva.
Publicidad
Vecinos del sector denunciaron que las personas eran sometidas supuestamente a torturas con tablas y toallas mojadas, utilizadas para asfixiarlos como forma de castigo.
El encargado del establecimiento señaló que los familiares de los internos pagaban más de $ 100 mensuales por supuestas terapias de desintoxicación.
Sin embargo, el sitio no contaba con los permisos municipales ni sanitarios necesarios para funcionar como centro médico ni geriátrico.
Publicidad
Los moradores aseguraron que durante los fines de semana se realizaban fiestas con música a alto volumen. En una ocasión, un supuesto colaborador habría intentado agredir a un vecino en estado etílico.
A consecuencia de ello se decomisaron varias cajas de cigarrillos y botellas de licor sin registro sanitario.
Publicidad
Edwin Chicaiza, líder zonal de la AMC en Calderón, informó que, además de la clausura inmediata del establecimiento, el propietario podría enfrentar una sanción de hasta ocho salarios básicos unificados, es decir, $ 3.760.
Las autoridades continúan con las investigaciones para determinar responsabilidades y el destino de las personas que estaban internadas en el lugar. (I)
