Falta de confianza en la efectividad de las vacunas, temor a los efectos después de la inoculación, desconocimiento del cronograma establecido para el proceso y dudas en torno a que si un paciente con enfermedades crónicas puede o no inmunizarse son algunas de las razones expuestas por quienes no han accedido a la vacunación contra el COVID-19, pese a que ya han tenido la oportunidad para hacerlo.