El estruendo fue tal que quienes dormían se levantaron asustados para ver de qué se trataba. Al salir de sus viviendas o al asomarse a ventanas, balcones o terrazas, los vecinos de las calles Eloy Alfaro, entre 10 de Agosto y 5 de Junio, vieron la magnitud de las llamas y cómo la pirotecnia reventaba junta en el aire.