La industria minera en Ecuador tiene grandes proyecciones para los próximos años. Se estima que ocho proyectos mineros, que se encuentran en distintas etapas, podrían generar más de $ 14.000 millones en inversiones si llegan a desarrollarse en su totalidad.

La estimación es parte del informe El futuro minero de Ecuador: entorno, perspectivas y comparativa regional, elaborado por las firmas consultoras Humboldt Management y Aequus Economics.

El reporte fue presentado por los economistas Santiago Caviedes y Juan Lorenzo Maldonado en un evento con empresarios y autoridades locales que fue organizado por la Cámara de Minería del Ecuador (CME).

Publicidad

Los proyectos mineros con alto potencial de inversiones de capital están en las provincias de Imbabura, Morona Santiago, El Oro, Bolívar, Azuay y Cotopaxi. Son los siguientes:

  • Cascabel: $ 4.500 millones
  • Warintza: $ 3.500 millones
  • San Carlos Panantza: $ 3.000 millones
  • Cangrejos: $ 2.000 millones
  • Mirador: $ 700 millones
  • Loma Larga: $ 400 millones
  • Curipamba: $ 300 millones
  • La Plata: $ 100 millones

Maldonado recordó que en 2024 el país recibió menos de $ 300 millones en inversión extranjera directa y que en “años normales” el promedio ha sido de aproximadamente $ 600 millones anuales.

Con ese antecedente calculó que en los próximos diez años solo las inversiones estimadas de los ocho proyectos mineros aportarían alrededor de $ 1.200 millones cada año.

Publicidad

Desde que la minería a gran escala empezó en Ecuador en 2019, impulsada principalmente por los proyectos Fruta del Norte y Mirador, las exportaciones del sector han escalado significativamente llegando a ubicarse en niveles similares a los de la industria bananera.

En 2024, la exportación de minerales superó los $ 3.000 millones, lo que representó el 8,9 % del total de las exportaciones del país.

Publicidad

El desempeño de la industria ha contribuido a que el país tenga una estructura externa más sólida, un sector monetario más resiliente a shocks externos y mejor capacidad de crecer, destacó Juan Lorenzo Maldonado.

En cuanto a empleo, con datos del Banco Central del Ecuador (BCE), al año 2023, la minería generó cerca de 55.000 puestos de trabajo directo.

Se estima que por cada empleo directo en minería existen tres indirectos. Según eso, el sector habría sido responsable en 2023 de cerca de 200.000 empleos totales, entre directos e indirectos, recoge el informe.

Maldonado resaltó que los registros del Banco Central hasta 2021 comprueban que la minería genera más ingreso de divisas frente al dinero que sale.

Publicidad

Para que el sector evolucione como se espera, o incluso supere las expectativas, se requieren inversiones adicionales para aumentar la capacidad instalada en generación eléctrica, remarcó el economista.

Santiago Caviedes expuso que el Estado recaudó $ 4.348 millones entre 2010 y 2024 en impuestos generales a las empresas relacionadas con actividades mineras.

El experto anotó que el sector minero aporta una gran cantidad de impuestos al país. “Muchas de las empresas mineras son de los principales contribuyentes”, expuso.

Indicó que el sector minero en 2024 aportó $ 1.002 millones a la caja fiscal, lo que representó el 5 % de la recaudación total del año, posicionándose como el quinto sector económico con mayor contribución tributaria.

“La minería es uno de los principales generadores de ingresos para el Estado ecuatoriano”, remarcó Caviedes, con base en los datos, y agregó que conforme se desarrollen los proyectos el aporte al fisco será mayor.

La Cámara de Minería resumió, en un comunicado, que entre los principales desafíos que se identifican para el desarrollo del sector están el déficit energético, una carga tributaria elevada —superior a otros países productores como Chile y Perú— y el elevado riesgo país que tiene Ecuador, lo cual limita la atracción de inversiones y afecta la competitividad del sector.

Además, la eliminación de la devolución anticipada del impuesto al valor agregado (IVA) “amenaza con afectar el flujo de caja de las empresas y desincentivar el desarrollo minero”.

El gremio señaló que, de acuerdo con el informe, “la minería se ha consolidado como un pilar clave de la economía ecuatoriana”.

No obstante, “su potencial transformador solo podrá materializarse plenamente si se facilita su crecimiento mediante políticas públicas que equilibren sostenibilidad, competitividad y rentabilidad”. (I)