Ecuador figura en la lista de los países más vulnerables al comercio ilícito, según el Índice de Comercio Ilícito 2025, publicado por la Alianza Transnacional para Combatir el Comercio Ilícito (Tracit).

El país ocupa el puesto 113 de 158 países, situándose muy por debajo del promedio mundial junto con otras naciones latinoamericanas como Colombia, Costa Rica, Panamá y México. A pesar de los esfuerzos continuos de las autoridades nacionales, el país sigue enfrentando importantes desafíos en la lucha contra el comercio ilícito, sostuvo la Tracit a través de un comunicado este lunes, 8 de septiembre.

Estos hallazgos fueron presentados el pasado junio en la 10.ª reunión de la Alianza Latinoamericana Anticontrabando (ALAC), celebrada en Ciudad de Guatemala, con la participación de autoridades y expertos en la materia.

Publicidad

El índice proporciona a los Gobiernos, responsables de políticas y organismos de aplicación de la ley un marco integral para evaluar la resiliencia frente al comercio ilícito. Al abarcar 158 países —desde mercados emergentes hasta economías avanzadas— destaca vulnerabilidades sistémicas, fortalezas y tendencias emergentes, al tiempo que ofrece recomendaciones prácticas para fortalecer las políticas nacionales, mejorar la aplicación de la ley y fomentar la cooperación internacional.

De acuerdo con Jeffrey Hardy, director general de la Tracit, el Índice de Comercio Ilícito 2025 es más que un ranking, también puede servir como herramienta de diagnóstico para los Gobiernos que buscan adoptar reformas estructurales.

“Al identificar debilidades clave, vacíos regulatorios y vulnerabilidades, el índice permite a los Gobiernos señalar las áreas que merecen mayor atención, diseñar medidas eficaces y tomar acciones específicas para combatir el comercio ilícito”, expuso Hardy.

Publicidad

El análisis detalla que los marcos regulatorios y de aplicación de Ecuador muestran signos de madurez, lo que indica que existen estructuras legales formales. Sin embargo, aún no cuentan con una implementación efectiva en todo el ecosistema.

Tracit indica que las autoridades ecuatorianas enfrentan importantes desafíos para monitorear los intermediarios a lo largo de la cadena de suministro. “El control de las actividades ilícitas sigue fragmentado en sectores clave de la economía, con una aplicación inconsistente. Problemas persistentes como la violencia, la inseguridad y la débil gobernanza agravan estas vulnerabilidades, creando un entorno propicio para las actividades delictivas. En estas condiciones, la resiliencia institucional se ve reducida mientras las redes de comercio ilícito continúan creciendo”, señala la organización.

Publicidad

El alcohol y el tabaco, los principales comercios ilícitos

De acuerdo con la Tracit, el comercio ilícito está lejos de ser un crimen sin víctimas. Pone en riesgo a los consumidores al inundar los mercados con productos inseguros y no regulados, mientras que las empresas legítimas son perjudicadas por redes criminales que a menudo dependen del trabajo forzado o infantil, agrega la entidad.

Además, los Gobiernos pierden ingresos fiscales vitales debido a que los operadores ilegales evaden la ley, y el crimen organizado canaliza esas ganancias hacia otras actividades ilegales —y frecuentemente violentas— que amenazan la seguridad pública.

Tracit señala que el crimen organizado se ha volcado cada vez más al comercio ilícito de tabaco como fuente principal de ingresos. El tabaco ilícito, fácil de ocultar y contrabandear, representa el 84 % de todos los cigarrillos consumidos en Ecuador, una de las tasas más altas de la región.

Los mercados vecinos enfrentan niveles igualmente elevados de tabaco ilícito, con Panamá en el 96 %, Costa Rica en el 47 % y Colombia en el 36 %.

Publicidad

El alcohol es otro sector afectado por el comercio ilícito. En un foro de 2021 organizado por la Cámara de Industrias y Producción del Ecuador (CIP), con la participación de la Tracit, los expertos señalaron que las altas cargas impositivas sobre licores y cerveza alimentan los mercados de alcohol ilícito.

El contrabando de cerveza a través de las fronteras de Ecuador ha aumentado considerablemente, al mismo tiempo que crecen el consumo de alcohol artesanal ilícito y los productos falsificados. “A medida que los consumidores se desplazan hacia productos ilícitos, Ecuador sufre una fuga fiscal generalizada, con una pérdida de más de $ 100 millones solo en licores ilícitos, lo que genera impactos negativos en los ingresos, la movilización de recursos y la creación de empleo”, señala la Tracit en su comunicado.

Asimismo, la débil aplicación de la ley y la baja conciencia del consumidor agravan el problema, permitiendo que alcohol peligroso y no regulado circule libremente y socave los objetivos legítimos de la salud pública. “Los daños no terminan ahí: industrias como la farmacéutica, la textil y la de pesticidas y semillas también se ven gravemente afectadas. En cada caso, el comercio ilícito erosiona la integridad del producto, pone en peligro a los consumidores y frena el crecimiento de los sectores”, concluye la Tracit. (I)