El Decreto 645 que a inicios de este año redujo el impuesto de consumos especiales (ICE) del 300 % al 30 % en armas de fuego, del 150 % al 50 % en cigarrillos electrónicos y otros dispositivos para tabaco y nicotina, así como bebidas alcohólicas, fundas plásticas, cigarrillos y bebidas azucaradas, vuelve a generar interés, pero ahora de organizaciones que buscan su derogatoria.