Si las grandes aerolíneas en mejor posición económica han tenido un remezón en sus ingresos por la pandemia del coronavirus, la situación de Tame se ha complicado más en estos días de cuarentena.

La aerolínea de bandera nacional, que ya venía arrastrando pérdidas, ha registrado una reducción del 65% en sus ingresos planificados, según una cifra premilinar que divulgó la aerolínea.

Tame, al igual que Latam, Avianca y AeroRegional, llevan casi dos meses sin poder realizar vuelos regulares de pasajeros por el confinamiento obligado que dispuso el Gobierno.

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La aerolína reconoce un impacto en sus ingresos, cuya magnitud dependerá del tiempo que tome la normalización de las actividades, de la situación económica
del país y de la evolución del mercado turístico y de transporte aéreo.

Actualmente, Tame trabaja con una menor plantilla debido a que solo se encuentra ejecutando vuelos especiales para repatriar a ecuatorianos. Otra parte de sus empleados ha sido enviado a vacaciones o están bajo suspensión laboral. Estas figuras han sido permitidas por el Ministerio de Trabajo.

Con un panorama que se presenta complejo para la industria aeronáutica, Tame planea un recorte de personal para hacer frente a esta nueva realidad.

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"La empresa tendrá que ajustarse a las circunstancias para poder continuar con sus operaciones para lo cual se prevé una reducción de personal, de acuerdo al análisis de necesidades concretas, que la operación requiera a futuro", respondió su departamento de comunicación, aunque no se precisó cifras.

Antes de la emergencia sanitaria, Tame había iniciado un proceso para optimizar su flota y reducir gastos, algo que la dejó con menos aviones.

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La aerolínea cuenta hoy con 5 aviones operativos: 3 ATR y 2 Airbus, que seguirán
operando para refozar el mercado nacional .

Latam y Avianca, multinacionales que cuentan con filiales en Ecuador, también están enfrentando dificultades financieras.

Días atrás, Avianca pidió ayuda al gobierno colombiano para salir de la crisis en la que se encuentra. Ya la compañía, antes de la emergencia, estaba agobiada por las deudas. Y en Colombia se ha debatido si el Gobierno debe o no apoyar su salvataje considerando que hay cientos de pymes que requieren apoyo y que la aerolínea ahora tiene más participación extranjera.

El gerente general de Latam Airlines, Roberto Alvo, explicó a fines de abril que la recuperación tras la crisis sanitaria sería más larga y lenta de lo esperado por lo que es inevitable que Latam Airlines y sus filiales deban redimensionar su tamaño y la forma en la que operan. (I)

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