El cardenal australiano George Pell, que salió de prisión hace una semana después de que un tribunal anulara sus condenas por abusos sexuales a menores, fue objeto de amenazas en internet, indicó la policía.

Pell quedó libre después de que el Tribunal Supremo de Australia anuló la sentencia en su contra por agresión sexual a dos monaguillos de 13 años en los años 1990.

Pero el martes, un importante periódico informó que se había abierto una nueva investigación contra el religioso católico de 78 años, quien sostiene firmemente que fue condenado injustamente.

Publicidad

Esta nueva acusación de abuso sexual infantil, que estaría siendo investigada por la policía, data de los años 1970, según el rotativo Herald Sun.

La policía visitó el seminario de Sídney donde reside el cardenal para darle indicaciones sobre su seguridad, informó un portavoz de la archidiócesis, para disipar los rumores de que los agentes lo habían visitado en el marco de la investigación recogida por el diario australiano Herald Sun. (I)