El 40% de las prendas de vestir y textiles de hogar, así como el 60% de las telas que ingresan desde otros países por las Aduanas está subfacturado o subvalorado. Así lo afirmaron representantes del sector textil ecuatoriano, quienes pidieron al Gobierno aplicar mecanismos de control más fuertes en contra de este tipo de prácticas.

Esta subvaloración podría haber causado $ 40 millones en afectación al fisco por evasión de aranceles e IVA. Otra forma de evasión es cuando quien importa entrega información con falsedad de origen o falsedad de la clasificación arancelaria. Ambas prácticas se conocen como  “contrabando técnico”.

Charles Dávila Bond, presidente de  la Asociación de Industriales Textiles del Ecuador (AITE), explica que de acuerdo con datos reales, existen importaciones en las que un par de zapatos ingresa con un valor facturado de $ 1. Hay vestimentas cuya facturación es de $ 0,10 y suéteres que el kilo se dice cuesta $ 0,30.

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Javier Díaz, presidente ejecutivo de la organización, comenta el origen de dichos productos: la mayoría son hechos en países asiáticos, uno de los principales es China. 

En esas naciones no se cumplen, como en Ecuador, los mínimos derechos laborales. En el país un trabajador del sector textil con todos los pagos de ley podría llegar a costar unos $600 mensuales, mientras que en esos otros sitios se explota la mano de obra pagándoles unos $ 30 mensuales, señala.

 

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Frente al fenómeno, la AITE pide al Gobierno aplicar mecanismos de control más fuertes en contra de este tipo de prácticas. Para Díaz, existen estrategias de control que se han adoptado en otros países de la región como Brasil, Costa Rica, Perú, Colombia, entre otros, que atacan al contrabando técnico, a través del control al lavado de activos. La Aduana debe realizar controles técnicos que permitan identificar los productos que llegan con valores que están por debajo del costo de la materia prima.

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Por el “contrabando abierto”,  de todo lo que entra por fronteras y aeropuertos, habría una afectación de al menos $ 150 millones más. Esas son las cifras que mostraron los representantes del sector textil, quienes pidieron medidas al Gobierno.

Díaz comenta que recientemente el Régimen emitió un instructivo a fin de que las Fuerzas Armadas apoyen al servicio de Aduanas en el control de contrabando abierto. El mecanismo se pondrá a prueba durante 4 meses y se esperan  resultados positivos para tomar estas medidas a largo plazo.

De acuerdo con el representante empresarial, también se debe tener una política con respecto a las ventas callejeras y en redes sociales.

El sector generó un aporte al PIB de $ 958,2 millones en 2018 y considera que su crecimiento en este año podría ser muy leve, de entre el 1%, y el 1,5%. (I)

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