La conformación del Consejo de la Judicatura (CJ) depende ahora de la decisión de los siete vocales del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPC) en transición.

Ayer se sustanció la última fase del proceso de selección de los cinco vocales principales y suplentes del único órgano de administración de la justicia, a la que se enfrentaron cinco candidatos.

El CPC no tiene un plazo para anunciar si aceptó alguna de las seis impugnaciones expuestas y si pedirá una nueva terna si es descalificado un postulante. O si resuelve integrar el CJ con los candidatos que estén calificados de las demás funciones del Estado.

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Esto, en medio de cuestionamientos que enfrenta la terna remitida por la presidenta de la Corte Nacional de Justicia (CNJ), Paulina Aguirre, a quien sectores sociales la acusan de falta de ‘legitimidad’, pues de esta nómina deberá elegirse al nuevo presidente del CJ.

María Rosa Merchán, una de las integrantes de la terna, fue impugnada por Paúl Jácome y Alejandra Cevallos, del caso ‘Los tres de Cotopaxi’.

Merchán leyó su defensa y dijo que ha sido la jueza mejor puntuada en los concursos.

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Jácome aseguró que si se la designa o a uno de sus colegas “no va a haber garantía de independencia” en la justicia.

A Julio Arrieta lo impugnó Ángel Orna; y a María del Carmen Maldonado, Ana Vera. Ambos también son parte de la terna de la Corte.

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De la terna de la Fiscalía General se impugnó a Yolanda Yupangui, por José Alomía y Óscar Ayerve. Y a Álvaro Román, Fidel Tamayo.

Las audiencias duraron unas nueve horas. Se escucharon frases como la de Yupangui, que le dijo a su impugnante: “La verdad, Pepito, ¡me sorprendiste!, éramos amigos”. (I)