El activista político Fernando Balda presentó este jueves en la Fiscalía General una denuncia por el delito de peculado contra el expresidente Rafael Correa; los exsecretarios de Inteligencia (Senain), Rommy Vallejo y Pablo Romero; el exministro de Interior, José Serrano, y otros cuatro exfuncionarios públicos más.

Balda lo que busca es que se investigue penalmente el uso de más o menos 500.000 dólares provenientes de recursos públicos para secuestrarlo en Bogotá, en 2012. Por este plagio, en Ecuador fue llamado a juicio Correa, Romero y los exagentes de inteligencia Raúl Chicaiza y Jéssica Falcón.

"En el llamado a juicio (por plagio) que hizo la jueza Daniella Camacho fueron admitidas como pruebas válidas una serie de documentos que confirman que fueron usados dineros del Estado ecuatoriano para contratar sicarios y secuestradores en Colombia para atentar en mi contra", explicó Balda antes de dejar en la Fiscalía una denuncia de cinco fojas y 168 fojas de anexos.

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Según el denunciante, los dineros usados para su secuestro habrían salido de fuentes como la Presidencia de la República, la Dirección General de Inteligencia de la Policía y de la Secretaría Nacional de Inteligencia, que respondía al Ejecutivo, al mando de Rafael Correa.

Fernando Balda denunció por peculado a Rafael Correa, Pablo Romero, José Serrano y otras 5 personas, por su secuestro realizado en Colombia en 2012 pic.twitter.com/iTOH2fNmPs vía @santiagomolinao

La denuncia también adjunta el pedido para que la Fiscalía solicite a la Contraloría del Estado realice los informes de responsabilidad penal respecto a estos dineros públicos usados, por ejemplo, en la Operación Guayacán; en los viajes, hospedaje, alimentación, etcétera, del entonces agente Raúl Chicaiza; y para pagar honorarios profesionales de abogados para Chicaiza y Falcón.

En estos rubros, explicó Balda, se habrían gastado aproximadamente 237.686 dólares. Pero existirían $ 250.000 que, según él, deberían verificarse su origen y gasto, pues existe la posibilidad que también fueron usados en el secuestro. (I)