En algunos sectores de Otavalo los moradores han comenzado a recolectar los catzos, que aparecen con las primeras lluvias que se presentan entre octubre y noviembre. Estos insectos, que son escarabajos, se aparean de septiembre a diciembre.

Las personas recolectan estos insectos, que son de color blanco, y los comercializan acompañados de tostado, según la tradición ancestral.

María Morocho, de la comunidad de Cambugán, de la parroquia de Quichinche, en el cantón Otavalo (Imbabura), comenta que este ritual de recolección de catzos se inicia desde las 05:00, cuando luego de las lluvias estos insectos vuelan en el cerro o en los sectores fríos, dijo al portal lahora.com.ec.

Publicidad

“Toca ir despacio y en silencio, instalarse donde no está sembrado y esperar que salgan para poder atraparlos antes de que vuelen”, sostuvo.

Durante esta época, un balde de catzos vivos se comercializa en alrededor de 15 dólares y una funda mediana en 4 dólares.

La preparación se inicia con poner en un recipiente los escarabajos vivos con harina de maíz o de trigo, para así eliminar la tierra de su sistema digestivo. Luego se les arrancan las alas y los élitros y se los deja en aguasal por hasta 48 horas. Al final, se los fríe en manteca de cerdo o en aceite, con cebolla, tomate y sal, señala el portal.

Publicidad

Los escarabajos blancos viven enterrados la mayor parte del año. Se afirma que estos insectos son una buena fuente de alimento porque contienen gran cantidad de proteínas. “Nuestros antepasados lo consideraban como una comida sagrada, enviada por los dioses para garantizar que el año venidero tenga una abundante cosecha”. (I)