El Instituto Ecuatoriano de Estadísticas y Censos (INEC) publicó una aplicación para descubrir el número de veces que se ha registrado un nombre o un apellido en Ecuador desde 1800 hasta el 2015.

De estos datos se concluye, por ejemplo, que María y Dylan fueron los nombres más usados por los ecuatorianos para inscribir a sus hijos durante el 2015. Iker, Lionel, Neymar, Kevin, Dulce María, Sherezade, Onur, Ashley, Mía, Dylan y Bryan (con sus variantes Brian y Brayan) son parte de los nombres foráneos que empiezan a ganar espacio entre los ecuatorianos.

Estos nombres, tomados de artistas, futbolistas o personajes de cine y TV, ganan adeptos entre padres jóvenes, quienes van dejando de lado a los tradicionales María y José, religiosos y clásicos por décadas.

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La fuente es la base histórica del Registro Civil de Ecuador. En 2015, Dylan (con 3.827) y María (3.418) fueron los nombres preferidos por los ecuatorianos para sus hijos, dice un comunicado del INEC. También constaron Luis, José, Iker y Erick. Y para las niñas: Emily, Danna y Mía.

María y José

No obstante, en el histórico desde 1800 hasta 2015 la preferencia la lideran José, con 530.441 inscripciones, y María, con 975.164.

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María Luisa Parra, 34 años, de la provincia de Tungurahua, cuenta que su papá le puso María porque en ese entonces no le aceptaron un nombre extranjero. “(María) en ese tiempo como ahora es uno de los nombres más comunes en el país, porque está ligado a la religión, por la virgen”, dice.

En el mercado Central de Ambato estaban ayer María Dolores y Luz María Quinlle Yaucán, quienes aseguraron que también les pusieron María a una hermana fallecida, a su mamá y abuela. “Los antepasados querían que no se pierda el nombre, por eso nos han puesto así, sin importar cuántas hemos sido”, dice una de ellas.

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En Santa Elena, en cambio, Ashley es el tercer nombre más común, entre 2000 y 2015. Ashley Almeida López, de 11 años, se llama así porque a su papá, Christian, le gustó el nombre de una de las gemelas Olsen (Ashley y Mary-Kate), quienes en su niñez fueron actrices populares en EE.UU.

La aplicación permite descubrir algunas curiosidades sobre los nombres y apellidos en Ecuador. Aquí compartimos algunas.

Los nombres anglosajones más comunes, de 1800 a 2015

Masculinos
Kevin y Kevyn: 77.663
Bryan: 75.953 (En la sumatoria se incluyó a otras formas de escribir el nombre, como Brian o Brayan).
Jonathan, Jhonatan y Jonatan: 74.247.
Jhon, John, Jonh y Jon: 65.840.
Edwin: 61.580.

Femeninos
Jennifer: 67.588 (Incluidas otras formas de escribir el nombre, como Jenniffer, Jeniffer, Jenifer y Yenifer).
Jenny y Yeni: 57.323. (Y otras formas de escribir).
Katherine y Catherine: 52.617 (En sus distintas formas de escritura).
Johanna 48.963 (En sus distintas formas de escritura).
Emily y Emilie: 42.672 (En sus distintas formas de escritura).

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Los nombres más comunes en Ecuador

María, Rosa, Ana, Carmen, Diana, Blanca, Martha, Jessica, Andrea, Mónica.

Casi un millón de personas en la historia registrada de Ecuador se han llamado María (975.164), con gran distancia, aparece en los registros el nombre Rosa (232.800), y le sigue Ana con 153.292 registros.

Mientras estos nombres han mantenido un registro constante a lo largo de la historia, otros se han popularizado en las últimas décadas. Por ejemplo, en 1986 existe un repunte de registros del nombre Diana (86.931 en total) y en 1989 ocurre lo mismo con Andrea (65.078 en total).

Los nombres menos comunes en Ecuador

Nayela, Marcianita, Briguithe, Homayra, Tilza, Britzia, Cremilda, Amado, Keythy, Kerelyn.

En el otro extremo, Los nombres Nayela y Marcianita se han registrado apenas 6 veces, cada uno. En Ecuador, una persona fue nombrada Marcianita en 1957 por primera vez y Nayela en 1971.

Los apellidos más comunes

Zambrano, Sánchez, Rodríguez, García, Vera, López, Cedeño, Torres, González, Castro.

Los apellidos menos comunes

Fischler, Molinares, England, Boudon, Marthinez, Gurung, Falkentoft, Skiadas, Blacido, Casuso.

Los apellidos que se extinguieron

En el Ecuador han desaparecido 391 apellidos desde 1800. En algunos casos, su último registro aparece a inicios del siglo pasado. Algunos ejemplos son: Alangací y Chiscueta, que registraron su última inscripción en 1916 y 1908 respectivamente. (I)