La Asamblea Nacional se allanó a las 10 observaciones contenidas en el veto del Ejecutivo de la Ley de Recursos Hídricos. Aprobaron 93 asambleístas, 19 votaron en contra y 7 se abstuvieron.

Las observaciones se referían a la redacción de  diez artículos de la ley relacionados con la Agencia de Regulación y Control del Agua (ARCA), déficit hídrico, las tarifas y autorizaciones para el aprovechamiento y usos productivos del agua en algunos sectores: envasamiento, acuícola, industrial, eléctrico.

El veto ratificó a la autoridad única del agua (Senagua) como la instancia de regulación, control y encargado de la fijación de tarifas del agua.

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La Ley que se aprobó el pasado 24 de junio es cuestionada por sectores indígenas pero defendida por los sectores oficialistas que aseguran que el nuevo cuerpo legal plantea la distribución del agua de forma equitativa y plantea medidas para redistribuir el producto y evitar el acaparamiento.  Además de que respeta el orden de prelación definido por la Constitución: primero el agua para el consumo humano; segundo, el agua para el riego; y, tercero para la producción de la soberanía alimentaria. Que garantiza el caudal ecológico, los distintos usos y aprovechamiento del agua y la sostenibilidad de los sistemas.

Con el allanamiento al veto, el cuerpo legal irá al Registro Oficial para su publicación y entrada en vigencia.