Una hidratación adecuada es fundamental para distintas funciones fisiológicas de nuestro organismo. Por ejemplo, varios estudios han explorado la relación entre el consumo de agua y la regulación de la glucosa en sangre y su impacto en la salud renal.
Si bien el agua no cura la diabetes, la evidencia científica sugiere que una ingesta adecuada puede ayudar a diluir los niveles de glucosa y facilitar el trabajo de los riñones al filtrar el exceso.
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En este sentido, existe un método específico para beber agua que te permite obtener la cantidad necesaria de 2 litros al día, favorece la función renal y a la reducción de los niveles de azúcar en sangre.
Reduce la glucosa en sangre bebiendo agua
Según Huffingtonpost, debes beber agua prestando atención a los siguientes pasos para diluir con efectividad el azúcar en sangre y ayudar a los riñones en su trabajo de filtrar el resto de la glucosa:
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- Bebe agua con jugo de limón en ayunas: Beber un vaso de agua con unas gotas de jugo de limón en ayunas ayuda a estabilizar los niveles de azúcar gracias a su aporte de vitamina C y su potencial hidratante.
- Bebe agua antes de comer: Una forma de controlar el apetito y prevenir los picos de azúcar en sangre consiste en beber un vaso de agua por lo menos media hora antes de cada comida. Esto también “facilita la digestión y puede mejorar la absorción de nutriente”, como indicó también Huffingtonpost.
- Complementa la ingesta de agua con ejercicio: Si bien tomar agua a lo largo del día ayuda a eliminar con mayor rapidez el azúcar en sangre, se recomienda complementar esta ingesta con ejercicio para así aumentar la sensibilidad a la insulina.
(I)
