Nuestro cuerpo funciona como un reloj preciso, con ritmos internos que regulan desde nuestro sueño hasta nuestro apetito. Este reloj biológico, conocido como ritmo circadiano, está influenciado por factores externos como la luz y la oscuridad.

Cuando este ritmo se desequilibra, pueden surgir problemas de salud como el insomnio, la obesidad, un mayor riesgo de enfermedades crónicas e incluso el envejecimiento prematuro. Por eso, es fundamental aprender a sincronizar nuestro reloj interno con el ciclo natural día-noche.

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Cinco trucos para regular el reloj interno

Exponte a la luz natural

Exponerse a la luz solar contribuye a la regulación del reloj interno. Foto: Unsplash

Según Vogue, la luz natural matutina regula tu reloj interno, promoviendo la alerta y energía. Por la noche, evita la luz artificial, especialmente la de pantallas, para favorecer la producción de melatonina y un sueño reparador.

Ejercítate 30 minutos al día

Dedica al menos 30 minutos diarios a ejercicios suaves como yoga, pilates o caminatas vespertinas que te ayudarán a conciliar el sueño más fácilmente. Evita entrenamientos intensos cerca de la hora de dormir porque pueden activarte en lugar de calmarte.

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Ten un horario de sueño regular

Foto: Freepik

Dormir y despertar a la misma hora todos los días, incluso fines de semana, regula tu reloj interno. Aunque también puedes dormir una o dos horas adicionales si necesitas recuperar el sueño perdido durante los días laborales.

Come en horarios regulares

Comer a la misma hora todos los días ayuda a regular tu cuerpo. Cena ligero al menos dos o tres horas antes de dormir y evita el consumo de comidas pesadas, cafeína y alcohol, de acuerdo con Vogue.

Relájate antes de dormir

Actividades como leer, meditar o un baño caliente preparan a tu cuerpo para el descanso. Evita estímulos como las pantallas y la luz azul, ya que dificultan la producción de melatonina.

(I)

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