A finales de la década de 1970, Christie se convirtió en una actriz renuente, eligiendo causas políticas en lugar del espectáculo, rechazando más papeles de cine de los que ha aceptado, prefiriendo la calma de su país llevando una vida en las campiñas escocesas contra los egos y el estrés de los sets de películas. “No me gusta mucho ese mundo”, dijo en 2006 al New York Times. “Siento que debería disculparme porque suena muy remilgado y desagradecido. Por supuesto he sacado mucho de eso y me alegro de que mi vida haya salido como lo ha hecho. Pero no puedo evitarlo: deja un sabor ligeramente malo en mi boca”.<em><strong>En 'Dr. Zhivago'.</strong></em>La actriz británica cumplió 80 años el 14 de abril pasado. Pero si se hace cálculos, ella está alejada del cine desde 2017 cuando prestó su voz para narrar la cinta <em>La librería</em>, de Isabel Coixet. Su última vez en pantalla fue en 2012 en <em>Pacto de silencio</em>, junto con Robert Redford, quien también dirigió este filme.Christie se ha llevado múltiples premios cinematográficos a casa, pero se destacan el Óscar por <em>Darling</em> (1965) en la categoría mejor actriz; también tuvo otras tres nominaciones, la última fue por Lejos de ella (2006). Christie iluminó clásicos como <em>Doctor Zhivago </em>(1965), filme en el que dio vida a Lara Antipova, un personaje que se quedó con el rostro de la actriz y es que, si bien no fue este el papel por el que obtuvo un Óscar, fue una interpretación importante en una gran producción de Hollywood que contaba con un elenco de profesionales más que notable entre el que destacan David Lean como director, Carlo Ponti, productor y Omar Shariff en el papel protagonista, Dr. Zhivago. Otros filmes en que la recuerda son <em>Fahrenheit 451</em> (1966) y <em>Lejos del mundanal ruido</em> (1967).<strong><em>Como Diana Scott en 'Darling'.</em></strong>Nació en la India cuando este país estaba bajo dominación británica. Sus primeros años transcurrieron en una plantación de té en tierras coloniales junto a sus padres, tuvo en ese tiempo dos hermanos, uno de ellos fruto de la relación de su padre con una mujer india que trabajaba en su plantación. Luego se fue a Europa. Al terminar sus estudios en París, donde se había mudado para mejorar su francés con la perspectiva de convertirse en lingüista (habla con fluidez francés e italiano), la adolescente se enamoró de la libertad del continente. La vida bohemia de los artistas también la conmovió y planeó convertirse en artista antes de inscribirse en la Central School of Speech Training de Londres. Luego se fue a Escocia, donde tuvo una difícil adaptación al colegio de monjas en el que fue internada por sus padres –tan difícil que no tuvieron más opción que cambiarla de centro–, llegaron sus estudios de interpretación en Brighton y Londres y, finalmente, los primeros pasos de su carrera profesional.Entre los 60 y 70 los papeles más importantes en los que trabajó fueron también en la comedia <em>Shampoo</em> y en el filme<em> Billy el embustero</em>, tiempo en el que se hizo un nombre en el mundo del cine. Para ese entonces Christie era ahora una superestrella que tenía un precio de $ 400 000 por foto. Ya en los 80 sus trabajos no fueron tan aplaudidos, pero en los 90 reapareció con <em>Afterglow</em> (1997). Ya en el milenio logró papeles en <em>Descubriendo Nunca Jamás (</em>2004), <em>Harry Potter y el prisionero de Azkabán</em> (2004), <em>Troya</em> (2004). Nuevamente la cineasta Isabel Coixet la volvió a requerir para su película <em>La vida secreta de las palabras </em>(2005).<strong><em>En 'outfit' jipi en 1968.</em></strong>Vale recordar que en 1965 fue cuando Christie se hizo conocida internacionalmente gracias a que John Schlesinger –su mentor– la dirigió en su papel innovador, como la modelo amoral Diana Scott en <em>Darling</em>, un papel que los productores originalmente le ofrecieron a Shirley MacLaine.<strong>En lo personal</strong><br /> Durante varias entrevistas, la actriz siempre ha hecho una introspección de su vida en el cine y ha preferido otras causas como activista, sobre todo cuando conoció a su antiguo compañero, el periodista Duncan Campbell –con quien se casó en secreto en 2008 luego de 28 años de noviazgo–, lo que llevó ella para repensar su carrera. Y fue entonces cuando comenzó a verse a sí misma en la industria del cine “rodeada de todas las cosas que más odias en la vida, que son el consumismo y la publicidad y las celebridades y la representación falsa”, dijo a <em>Variety.</em><em><strong>La actriz británica fue ícono del 'swinging London'.</strong></em>De una infancia revoltosa –debido a la separación de sus padres– pasó a una juventud apasionada. En los 60 era uno de los personajes más populares de Londres, en los 70 se trasladó a vivir a Hollywood arrastrada por el apasionado romance que mantenía con Warren Beaty. El final de la relación marcó su regreso a Europa. Actualmente vive con su marido en un pueblo de Alicante y no se la ha vuelto a ver merodear por la gran pantalla desde 2017.Desde entonces, “la más poética de todas las actrices”, como la llamaba Al Pacino, disfruta de un semirretiro autoimpuesto, situación que no la ha alejado de las miradas de nuevos cinéfilos quienes descubren sus clásicos cinematográficos. Fue en 1963 que Christie saltó a la fama por su trabajo en Londres. Empezó con una actuación innovadora en <em>Billy el embustero </em>de John Schlesinger.<strong><em>Al Pacino la llamaba “la más poética de todas las actrices".</em></strong>Obtuvo una segunda nominación a mejor actriz por <em>McCabe & Mrs. Miller </em>(1971) de Robert Altman, en la que interpretó a una prostituta que se une a un jugador (su entonces novio Warren Beatty ) para abrir un burdel. Aunque su relación duró poco, Christie se reunió con Beatty en la pantalla para<em> Shampoo</em> (1975) y <em>Heaven Can Wait</em> (1978).Todo parecía que ganaría una segunda estatuilla dorada a mejor actriz por interpretar a una mujer que sucumbía lentamente al Alzheimer en <em>Lejos de ella </em>de la directora Sarah Polly. La película le trajo victorias en los Globos de Oro, SAG y Critics Choice, pero perdió el Óscar contra Marion Cotillard (<em>La vida en rosa,</em> 2008).Todo este viaje entre premios y su cansancio en el mundo del cine, todavía tenía que adaptarse para crecer o, más bien, envejecer. “Todas las mujeres son conscientes de ese momento en que de repente los hombres no te miran. Es una cosa bastante común, cuando de repente ya no atraes esa atención masculina instantánea debido a tu aspecto. Realmente nunca supe cómo disfrutar de la belleza, pero tomó la forma de una arrogancia subconsciente, esperando cosas, todo confundido con la celebridad”, dijo al <em>New York Times</em>.<strong><em>Junto a su esposo Duncan Campbell.</em></strong>La actriz añade: “Entonces comienzas a lidiar con eso. En la década de 1970 me sorprendió que me hablaran como un símbolo sexual de los años 60. No era esa persona, como si fuera una muñeca del pasado. Tuve que aprender a aceptarlo. Es gracioso, es tonto, lo ridículo de haberle pedido tanto a celebridades. Entonces se vuelve realmente interesante y una gran parte de la emoción de la vida que estás viviendo ahora, sabiendo que te estás acercando al final”.En sus 80 años, Julie Frances Christie es una actriz y símbolo sexual británica. Ella se ha referido de forma dura a la meca del cine. “Prefiero hablar con mis patos que con algunos de los monstruos que conocí en Hollywood”. También firmó para interpretar a la protagonista femenina en <em>American Gigolo</em> (1980) junto a Richard Gere, sin embargo, cuando Gere se retiró y John Travolta fue elegido para el papel, Christie también se retiró del proyecto. Gere cambió de opinión y retomó el papel, sin embargo, era demasiado tarde para Christie ya que Lauren Hutton ya había tomado su parte.<strong><em>Junto a su ex pareja, el también actor Warren Beatty en la comedia 'Shampoo'.</em></strong>En 2008, la actriz narró <em>Uncontacted Tribes</em>, un cortometraje para la organización benéfica Survival International, con sede en Inglaterra, que presenta imágenes nunca antes vistas de pueblos remotos y en peligro de extinción. Por ello fue nombrada como embajadora de ese movimiento mundial en 2008.Ella ocupó el noveno lugar en la lista de las ‘100 mujeres más sexy de todos los tiempos’ de la revista <em>FHM</em> (For Him Magazine) y en 2009, Christie, a sus 68 años, ocupó el segundo lugar ‘Las mujeres más sexys del mundo en la revista húngara <em>Periodika</em>. Como dijo el crítico Jon Hopwood en IMDB: “Como todos los seres humanos, queremos más, pero en los últimos treinta y cinco años hemos aprendido a contentarnos con los diamantes que son las principales actuaciones de Julie que da solo una vez por década, contentos de sentir que son un exceso de riquezas, nuestro exceso de riquezas, tan grande es su luminiscencia”. <strong>(A. C. J.)</strong>