Cuatro menores junto con sus padres permanecían en los exteriores del centro de salud n.º 4, en las calles Francisco Segura y avenida Quito, en el centro sur de Guayaquil, la mañana del sábado 3 de mayo. La mayoría tenía tos fuerte. Según sus familiares, ya eran cuatro días que estaban con esos síntomas y cada vez empeoraban.