Delegados del Municipio de Guayaquil mantienen controles a planteles educativos para que se siga la disposición del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) local sobre la prohibición de clases presenciales en la urbe.

Por ahora, ante el incremento de contagios, hospitalizaciones y muertes por COVID-19, las autoridades mantienen a la ciudad en nivel de alerta 3, que implica la prohibición de clases presenciales en planteles educativos.

Este martes 25, autoridades cantonales clausuraron dos instituciones educativas: una particular, situada en la ciudadela Los Ceibos; y otra fiscal, del sector Los Vergeles, en el norte porteño.

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El lunes pasado, el cabildo dispuso similar medida en tres instituciones fiscales. En los sellos de clausura, los funcionarios escribieron: “Prohibido clases presenciales”.

A la sede del colegio Guayaquil, una de las instituciones sancionadas, acudió el lunes anterior la ministra del ramo, María Brown, a fin de corroborar el retorno progresivo y voluntario de alumnos a clases presenciales avalado por el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) nacional.

Pese a ello, el cabildo dispuso una medida contraria debido a las cifras de contagios y hospitalizaciones por COVID-19 en la urbe, y desplegó operativos de control para el cumplimiento de la regulación.

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Los planteles sancionados deberán mantener el cierre por 30 días y realizar el pago de una multa de hasta siete salarios básicos ($ 2.975). (I)