Bastoneras, cachiporras, niñas vestidas con trajes típicos de Guayaquil antiguo y niños con atuendos de Juan Pueblo fueron parte de los cerca de 3.000 estudiantes de al menos 20 colegios del sur y suburbio de Guayaquil que recorrieron la mañana de este sábado 15 de julio las calles del barrio Garay, en medio de uno de los desfiles más esperados.
Tambores, trompetas y banderas también portaron los alumnos que caminaron durante más de una hora por la zona deleitando a los vecinos que se asomaron a las ventanas y balcones para grabar y tomar fotos.
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Algunos vecinos hasta sacaron sillas a los portales para no perderse de ningún detalle del recorrido de los estudiantes que llegaron a las 10:30 al suburbio y desfilaron por varias calles.
“Yo también fui bastonera en el colegio Guayaquil”, contó con una sonrisa Leonela Alcívar, de 62 años, quien dijo haber recordado sus años de juventud al ver a las colegialas pasar al pie de su casa con sus trajes, sincronizadas, desfilando felices.
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A lo largo de la calle 10 de Agosto también estaban padres de familia acompañando a los estudiantes. Iban pendientes de sus hijos.
Blanca Solano iba con una botella de agua y un par de gorras en las manos acompañando a sus hijos hasta el final del desfile. Caminaba pendiente de ellos para brindarles un poco de agua si lo pedían.
“Han practicado mucho en el colegio y hasta se conectaban en las noches con sus compañeras para alistar los últimos detalles y pulir los pasos”, contó Lorena Ochoa, otra madre que acompañaba a su hija hasta el final. Ella habría acudido al barrio Garay desde el Batallón del Suburbio.
Incluso llegaron estudiantes del colegio réplica Vicente Rocafuerte, ubicado en el sector conocido como La Ladrillera.
Los cerca de 100 estudiantes de ese plantel se despertaron muy temprano para atravesar la ciudad y llegar a tiempo al suburbio. (I)