“Ven con nosotros a caminar Santa María, ven. Aunque te digan algunos que nada puede cambiar, lucha por un mundo nuevo, lucha por la verdad”. Este era parte del cántico que conmovía a la feligresía en su ascenso hacia el cerro donde se ubica el santuario del movimiento de Schoenstatt, en la parte final de la romería antes de llegar al santuario.