Fiama pinta y descubre palabras en las sopas de letras que le entregan a diario en el hospital del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social de Los Ceibos desde hace quince días.
Junto con otra docena de niños comparten y juegan mientras ella atraviesa una recuperación lenta por una cirugía en el abdomen.
La niña, de 8 años, tuvo una intervención en la que estuvo en riesgo su vida el pasado 28 de abril.
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Días antes de esa fecha, en una madrugada, se despertó con un fuerte dolor de estómago que su familia pensó que se derivaba de una enfermedad viral.
Su abuelo Roberto Chica y la madre de la menor la llevaron hasta un centro de salud, pero allí le indicaron que volviera a casa.
El 26 de abril el dolor se volvió intenso y al ingresarla al hospital detectaron que se trataba de una peritonitis. Fiama fue operada por al menos tres horas.
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Durante la intervención le realizaron la limpieza de varios órganos y trataron una infección fuerte que había provocado la peritonitis.
“Pensamos lo peor, pero gracias a Dios ella está aquí con nosotros”, relató Chica.
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Dos días después de la cirugía, Fiama ya buscaba mantenerse activa aun sin ir a clases. “Yo me olvido por un momento que estoy en un hospital”, dice la menor.
Los maestros que recorren las instalaciones del hospital y que forman parte del programa Aulas Hospitalarias brindaron el acompañamiento para que la niña no pierda el interés en las actividades educativas.
Fue así como Fiama, cuando ya pudo levantarse de la cama, accedió a las clases preparadas por los docentes que están en el establecimiento de salud.
En el hospital del IESS en Los Ceibos hay dos aulas en las que a diario se educan de diez a quince niños que permanecen internados por intervenciones quirúrgicas o enfermedades varias.
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Desde el 2017, cuando se implementó el programa, se ha beneficiado a 4.745 niños, niñas y adolescentes, quienes reciben atención educativa integral y personalizada, de lunes a viernes, de 07:00 a 12:00, tanto en las aulas como en sus habitaciones.
Fiama, por ejemplo, es parte de los menores que llevan quince días en el hospital.
Otros niños como Mía, de 7 años, que también accederá a las clases- tienen cuatro días y esperan recibir clases para no perderse de nada en su inicio a clases.
Su madre, Ángela Oviedo, contó que ella debía iniciar clases este lunes, 12 de mayo, pero una dolencia en el pie izquierdo la hizo aplazar el ingreso.
“Ella tiene una bolita en el pie y eso la hacía caminar de puntita. A ella le gusta correr y eso ya no podía hacer y la tenía muy triste”, contó la madre de familia, quien participó de la ceremonia de inicio de clases 2025-2026 en las aulas habilitadas en el hospital este martes.
Jorge Salas von Buchwald, gerente del Hospital General Los Ceibos, dijo que esta iniciativa implementada reafirma el compromiso del establecimiento con la educación. (I)