Familias que creían que el cuerpo de su pariente estaba sepultado en paz, que incluso le llevaban flores y lo recordaban en un camposanto en la Aurora, en Daule, ahora sienten incertidumbre ya que los cadáveres de sus familiares son exhumados por agentes especializados del Servicio Nacional de Ciencias Forenses junto con la Fiscalía, debido a inconsistencias halladas en el proceso de identificación de víctimas de COVID-19 en el hospital Los Ceibos del IESS.

Freddy Herrera, coordinador de Medicina Legal del Servicio Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, explicó que este proceso de exhumación se hace a un grupo de 45 cadáveres del hospital Los Ceibos que fueron inhumados directamente por el IESS a inicios de la pandemia en Guayaquil. Desde el pasado lunes se les toma muestras de ADN para corroborarlo con los datos de su familia y comprobar si coinciden o no con los nombres atribuidos.

"Nos llegó un parte policial de Dinased en que se encontraron muchas inconsistencias. Aparte también hubo reportes de que los propios familiares ingresaron a retirar los cuerpos a ese hospital. Hubo manipulación y no hubo orden en la entrega, y por eso es la duda de Fiscalía", explicó Herrera.

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Jenny Villegas es una de las afectadas, que aún no recibe noticias del cuerpo de su esposo, que falleció en el hospital Los Ceibos el 29 de marzo pasado. Está atenta a este proceso, pues ella junto a otras diez personas más sufren esta espera de información de su ser querido. "Es una esperanza para mí, porque por ningún otro método ha dado resultado positivo la identificación del cuerpo de mi esposo. Espero que con estas exhumaciones se pueda seguir encontrando la verdadera identidad, es un proceso muy doloroso y espero que acabe", lamentó la mujer.

El Servicio Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses recibió tres contenedores con más de 250 cadáveres sin identificar debido a la mala manipulación de los mismos en hospitales como Guasmo sur, Los Ceibos y Monte Sinaí. Un equipo de investigación aplicó tres métodos para revelar la identidad de los cuerpos: el primero fue por huella dactilar, luego el antropológico y el último por ADN. Hasta el momento se han reconocido y entregado más de 170 cuerpos; hay unos 60 más que no han podido ser identificados.

Ayer, Mirelli Icaza, delegada del Guayas de la Defensoría del Pueblo, acudió a la diligencia de exhumación para vigilar el proceso. "Nosotros como Defensoría hacemos la vigilancia, ya que hay una demanda de acción de protección y le hacemos seguimiento. Además, tenemos familias que se acercan a nosotros buscando una respuesta, se encuentran desconsolados", lamentó ella.

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Hasta ayer eran 36 los cadáveres exhumados. Se espera finalizar hoy. Para hoy se tiene previsto una rueda de prensa de los afectados que aún buscan los cuerpos de sus familiares. (I)