El reencauche es definido como una renovación de la banda de rodamiento de la llanta con lo cual se le da un nuevo periodo de vida, puede presentar el mismo diseño original o cualquier otro diseño, depende de la necesidad del propietario del neumático. Este procedimiento se mantiene alineado con todo lo referente a sostenibilidad y cuidado ambiental, porque en el momento que se reutiliza una llanta se usa menos petróleo en su producción, se emiten menos gases tóxicos al ambiente y se utiliza menos energia que en la fabricación de una llanta nueva. Es decir, genera un ahorro importante en torno al uso de materia prima, energia y costo final para el usuario.
En la actualidad, existen varias empresas dedicadas al reencauche de llantas para vehículos pesados que se encargan de recibir las carcasas (llantas usadas) y proporcionarles una nueva banda de rodadura cumpliendo con estrictos controles, tanto nacionales como internacionales, logrando alcanzar niveles óptimos de calidad y seguridad.
Un proceso técnico obligatorio
Pablo Cárdenas, gerente de comercialización de Durallantas, explica que se trata de un proceso técnico que se debe realizar de forma prácticamente obligatoria, pues no hacerlo significa desaprovechar una propiedad para lo cual fue construida. “El transportista tiene que tomar una decisión como cuando compra la llanta nueva. Somos pocas las reencauchadoras que cumplen con las normas de ley y calidad. No es lo mismo ir a cualquier lugar, que ir por ejemplo a Durallantas, que tiene 42 años en el mercado y cumple todas las normas INEN y de calidad; cuando se acude a una empresa seria y reconocida el producto final va a ser muy distinto, al mismo tiempo que se eliminan los riesgos. El proceso de reencauche es tan técnico como el proceso de la fabricación de una llanta nueva”, enfatiza.
Ventajas al usar neumáticos reencauchados
Son varias:
- Reducción de costos operativos.
- Está alineado con la sostenibilidad y es menos contaminante que la producción de llantas nuevas.
- Es falso que estallen (el recauchutado es integral), o que no puedan ser balanceadas.
Si bien todas las llantas de vehículos pesados son aptas para ser reencauchadas, los especialistas recomiendan que las ruedas direccionales no reciban este tratamiento, sino solamente las de tracción o las demás posteriores.
“Se trata de un proceso técnico que, cuando se realiza en lugares especializados tiene un rendimiento muy similar al de una llanta nueva para uso de transporte pesado. La recomendación es reencauchar para la parte de tracción y arrastre. Con un buen cuidado del neumático, como por ejemplo, bajo los correctos controles del departamento de flotas de la empresa Antonio Pino Ycaza, especializada en este tipo de servicios, una llanta (carcasa) de marca Goodyear se puede llegar a reencauchar hasta tres veces sin ningún problema”, explica Erick Tamayo, director comercial de la empresa Antonio Pino Ycaza, compañia que reencaucha neumaticos para vehículos pesados.
Cuándo reencauchar
Dependiendo del uso del neumático, los expertos recomiendan realizar el procedimiento técnico de reencauche cuando el milimetraje del labrado remanente alcanza de 2 a a milimetros: si la llanta pasa ese nivel, recomiendan que se consuma completa y no se reencauche.
El usuario debe saber que el fabricante de llantas nuevas las produce con la finalidad de que sean reencauchadas. “Todas las llantas están hechas para ello, es decir, Bridgestone, Pirelli, Goodyear, las fábricas de mayor prestigio piden comprar sus llantas y son también las que mas veces se van a poder reencauchar”, asegura Pablo Cárdenas.
“En Antonio Pino Ycaza, el proceso técnico de reencauche para neumáticos de vehículos pesados puede demorar entre tres y cinco dias, dependiendo de los resultados de la inspección fisica y de acuerdo con estándares de calidad definidos por el proceso” complementa Erick Tamayo.
Hay que destacar que no todas las llantas son aptas para el reencauche, algunas pueden ser rechazadas por diversos motivos, entre ellos desgaste excesivo, daños o perforaciones.