Los negritos (así los nombraron en el programa) se conocieron en la universidad, los gordos en la playa y los casados en el quehacer periodístico. Estas tres parejas contaron parte de su historia de amor. Los jueces comentaron sobre los relatos. Luego tenían que demostrar cuánto conocían a sus parejas respondiendo preguntas de la vida cotidiana. Hubo el momento de la verdad y del amor, la prueba del polígrafo, incluso, al final, una petición de matrimonio.