Roberto Ordóñez Ayoví, delantero campeón de Ecuador en 2019 como símbolo del Delfín de Manta, hoy se siente “humillado, pisoteado” en filas de Aucas. Mejor conocido como la Tuka, el experimentado futbolista (36 años) exteriorizó su incomodidad este martes por un supuesto maltrato recibido por el club de Quito, que lo marginó este año a los entrenamientos con las divisiones inferiores y ante lo cual reclama una deuda de nueve meses.