La gestión de cobranza, generación de superávit o déficit, la variación de ingresos, deudas con los árbitros y endeudamiento son mejor manejados por la Liga Profesional de Fútbol del Ecuador (LigaPro) que por la Federación Ecuatoriana de Fútbol, según los balances de los últimos tres años que se han hecho públicos por parte de ambas instituciones.