Considerado el Estadio Olímpico Municipal de El Batán un “elefante blanco” el día de su inauguración en 1951, en la actualidad ese escenario es un ícono del deporte quiteño y nacional, una historia que se recoge en las páginas del libro Olímpico Atahualpa, el templo del fútbol 70 años.

De los autores Raúl Cruz Molina y el estadígrafo Jaime Naranjo Rodríguez, el libro es un vuelo por la historia del mítico escenario, sede de importantes gestas deportivas, además de eventos políticos y religiosos que marcaron la historia del Ecuador.

El estadio municipal demoró tres años en su construcción, con un costo de 30 millones de sucres (moneda nacional de la época), hasta su inauguración el 25 de noviembre de 1951.

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En los años que ha abierto sus puertas a la afición capitalina y nacional, el estadio de El Batán sufrió modificaciones y restructuraciones como la implementación de las primeras luminarias en 1969 hasta los últimos trabajos de adecuación en 2020 cuando se instalaron modernas luces ledes, acordes con las exigencias internacionales.

Principalmente escenario futbolístico, por el gramado del Atahualpa pasaron figuras como Pelé, Alfredo di Stéfano, Gordon Banks, Ferenc Puskás, Zico, Diego Maradona, hasta los más recientes Ronaldinho y Lionel Messi, parte de una interminable lista “de míticos personajes” del fútbol mundial en visitas con clubes y selecciones que cumplieron giras por el país, con el Atahualpa como sede.

“El estadio es un mito sagrado de nuestro fútbol, de nuestro deporte, de la ciudad y el país, en una historia que refleja tantas historias maravillosas”, comentó Cruz durante la presentación del libro.

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Naranjo repasó lo que fue la jornada inaugural del estadio, con un cuadrangular en el que participaron Cúcuta Deportivo y Río Guayas como el primer partido disputado, con triunfo 4-3 para los colombianos, y en el juego estelar empate entre Boca Juniors de Cali (2-2) con la selección de Pichincha, “un juego disputado bajo un aguacero como pocas veces, por lo que debió suspenderse a los 27 minutos del segundo tiempo. La recaudación fue 331.579,30 sucres”, detalló.

En el ámbito futbolístico, el Olímpico Atahualpa fue sede de las tres clasificaciones de la selección de Ecuador a los mundiales del 2002, 2006 y 2014, así también eventos como la Copa América 1993 y el Mundial Sub-17 en 1995.

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Entre los eventos políticos destaca el vibrante mensaje a la nación ofrecido por el presidente Jaime Roldós Aguilera el 24 de mayo de 1981, fallecido esa tarde en un accidente aéreo cuando se desplazaba de Quito a Loja.

También se recuerdan eventos religiosos como el encuentro del papa Juan Pablo II con la juventud ecuatoriana en enero de 1985, un acto con 50.000 concurrentes.

Portada del libro 'Olímpico Atahualpa, el templo del fútbol 70 años'. Foto: Marcelo Gallo Oña

Historias y anécdotas “maravillosas, de deportistas y personajes del balompié capitalino” se recogen en las páginas de Olímpico Atahualpa, el templo del fútbol 70 años, un escenario que, aunque funcional, “pide” una remodelación.

El futuro: Arena Atahualpa

El principal escenario deportivo de la capital “ha cumplido su vida útil”, dijo Jaime Ruiz, presidente de Concentración Deportiva de Pichincha (CDP), entidad que tiene a su cargo el manejo del estadio.

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Son más de 70 años en que ha dado su vida por el deporte ecuatoriano, pero tiene requerimientos por seguridad y condiciones más adecuadas. Pide a gritos una remodelación”, comentó Ruiz.

Con Ruiz coinciden los autores de esta obra histórica. “Sí, necesita reconstrucción, no demolición como sueñan algunos personajes de la dirigencia del fútbol ecuatoriano por sus mezquinos propósitos personales o de grupos que representan. Por eso esta lucha, esta bandera para defender a este escenario, testigo de tantos hechos, porque aquí vive el fútbol, en la casa de la Selección, porque la historia no muere”, dijo Cruz.

Presentación del libro 'Olímpico Atahualpa, el templo del fútbol 70 años'. Foto: Marcelo Gallo Oña

Con un proyecto de remodelación que lleva ocho años sin concretarse, en un primer intento por parte del Gobierno nacional y en los últimos tres años con CDP, “queda pendiente el Arena Atahualpa para que siga con su historia”, consideran autoridades y autores del texto que recoge las primeras siete décadas de vida del escenario.

“Hay nueve empresas interesadas en remodelar, con tres condiciones que se deben cumplir, primero con un financista, luego un diseñador y finalmente un constructor, el único modelo de negocio, para quien invierta lo administre a partir de una entidad comercial. Queremos que el estadio que fue testigo de grandes gestas siga siendo un escenario ícono, como centro urbano y de desarrollo”, concluyó Ruiz. (D)