A inicios de este 2025, el colombiano Leonel Álvarez fue separado de la dirección técnica de Emelec y en su reemplazo llegó el argentino Jorge Célico, quien meses después tuvo el mismo destino que su colega colombiano.

En enero, en el inicio de la pretemporada, a su retorno a Guayaquil, el entrenador se quejó de la falta de pago de su sueldo por parte de la directiva que encabezaba César Avilés.

“Yo voy para el cuarto mes que no cobro ni un peso. No es como se dice que estoy al día y si estuviera al día, para eso vengo. Es difícil y complejo que a uno no le cumplan. Lo mismo con los jugadores. Ahora empezamos la pretemporada y esperamos hacerlo con pie derecho”, decía Álvarez.

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Tras su salida trascendió que no existía una buena relación entre el colombiano y sus dirigidos. En la actualidad, el mundialista con Colombia está al mando del Atlético Bucaramanga y en una entrevista fue consultado sobre su trato con sus jugadores.

“Soy entrenador, amigo, padre, ese padre que a veces tiene que hablar durito. A veces la cara no me favorece porque piensan que estoy enojado”, comentó.

“De verdad yo les digo: soy un feíto tierno, de muy buenos sentimientos, el haber jugado me permite entenderlos a ellos (los jugadores), pero hay exigencia porque cuando aspiras a cosas importantes, ningún camino es fácil”, añadió en conversación con Arleydeportes.

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Y continuó: “Siempre habrá algo que tratemos de solucionar de buena manera porque somos seres humanos y entendemos y le pedimos al jugador profesional que aporte su capacidad, somos de todo un poquito”. (D)