Benjamin Mendy, acusado de siete cargos de violación, pasó la Navidad en una de las cárceles más duras y siniestras de Inglaterra, tal y como publica The Sun. El lateral izquierdo, suspendido por el Manchester City el pasado mes de agosto, fue trasladado el pasado 23 de diciembre desde el penal HM Prison Altcourse de Categoría B de Liverpool a la cárcel de máxima seguridad Strangeways, situada en el norte de Mánchester.