A finales de agosto pasado, Simón Cañarte Rendón, periodista deportivo con más de 35 años de trayectoria en radio y televisión, sufrió un infarto que le cambió la manera de ver la vida.
El comunicador se ha alejado de sus actividades cotidianas, pues se encuentra en un proceso de recuperación, el cual ha involucrado una serie de cambios tanto en la alimentación como en las actividades físicas.
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En un diálogo con EL UNIVERSO, el informador reveló aquellos detalles que se le presentaron luego de haber estado internado y cuáles son los métodos de terapia que realiza para llevar una vida saludable.
“Salí de la clínica bien del tema del corazón, ya que me pusieron un stent. Me destaparon una arteria, pero salí con un colapso en el glúteo izquierdo, parecía como que tenía un desgarre y no podía caminar, no podía pararme, estaba muy mal”, detalló.
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“Incluso tuve que volver a la clínica para recuperarme bien, porque salí con una especie de erisipela en el pie. Entonces, ahí me pusieron infiltración, me hicieron terapia en el sector del glúteo para tratar de reanimarme. La verdad que la vida me ha cambiado muchísimo a mí”, agregó.
En cuanto a la alimentación, el comunicador asegura que le prohibieron embutidos, grasas y café, pues su dieta ahora deberá basarse en comida light y debe cocinar con aceite de oliva para poder tener una pronta recuperación. Lo que si puede comer es “pollo, pescado y muchas verduras”.
Asimismo, los doctores le recomendaron realizar una serie de ejercicios que involucra “levantamiento pesas, subir y bajar escaleras, movimiento con balones” para recuperar la fuerza perdida durante el tiempo que estuvo sin realizar actividades.
Cañarte solicita la ayuda tanto de conocidos como desconocidos, pues afirma que en el día tiene que tomar alrededor de siete pastillas, que tienen un elevado precio en las farmacias, pero está contento porque prácticamente volvió “a la vida”.
El periodista indica que en el caso de que quieran ayudarlo se comuniquen escribiendo al 099-081-6369, pues él estará contestando solo por mensaje, ya que prefiere no ser llamado. (D)