La etapa como jugador de Emelec del volante Dixon Arroyo terminó la mañana de este sábado, 8 de abril, luego de que el club guayaquileño anunciara su salida.

La relación entre la escuadra guayaquileña y el futbolista tuvo fisuras luego de que el pasado 30 de marzo el plantel de Miguel Rondelli habría decidido no entrenar por solidaridad con él debido a una deuda de dos meses de sueldo.

En aquellos días, José Pileggi Véliz, presidente de Emelec, fue consultado sobre la postura de Arroyo y respondió con tono de enojo: “Hay que preguntárselo a él”.

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“No hay ninguna situación (anormal). Nosotros estamos al día con nuestras obligaciones, y cualquier cosa será tratada disciplinariamente con la persona que ocasionó esto”, agregó.

Luego, el volante había mencionado que no se trataba de una “demanda”, sino de una notificación a la institución por la deuda que tienen con él.

“Mientras a mí no me comuniquen lo contrario (de no entrenar), tengo que estar en el club y entrenando. Gracias a Dios, tengo el respaldo de mis compañeros, porque no es solo a mí: es con más jugadores”, había mencionado sobre su continuidad.

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Sin embargo, Arroyo no fue parte en la jornada pasada de la nómina que viajó a Portoviejo para medir al Delfín por la Liga Pro, ni tampoco de la que fue a Montevideo para medir a Danubio por la Copa Sudamericana.

La mañana de este sábado, en un escueto comunicado, Emelec, sin dar mayores detalles, indicó que se dio por terminada la relación del jugador con el club. (D)