Con una sonrisa de satisfacción y pleno de orgullo uno de los presidentes de la Federación Ecuatoriana de Fútbol, destituido por sus compañeros de directiva por falta de transparencia, versiones falsas del manejo institucional, según la resolución que lo bajó la rica cabalgadura que ostentaba, anunció hace unas horas que el entrenador de la Selección, Jordi Cruyff, había resuelto poner fin a sus ‘vacaciones’ pagadas y volver al Ecuador, del que se despidió el 13 de marzo pasado, sin permiso del directorio de la FEF, a la que ha cobrado al menos $1 millón sin trabajar.