Barcelona encontró, o más bien reencontró su nivel. A principios de año, decíamos que no entendíamos el porqué había cambiado tanto el rendimiento mostrado en el 2016 a uno distinto, con prácticamente los mismos elementos. Ahora reencontró una estructura y una identidad que es muy simple: mucho juego exterior, de mucha velocidad e interiormente con llegadas. Con delanteros, como Jonatan Álvez y Ariel Nahuelpán, muy incisivos, de aguantar bien la pelota de espaldas. Uno picando más, Álvez; el otro, Nahuelpán, sosteniendo el balón para que lleguen los exteriores.

Los futbolistas de Barcelona están interpretando bien una estructura de juego. Tanto es así que se nota claramente que si no está uno hay otro para hacerlo.

Dijimos, a comienzo de campaña, que no era correcto descartar a Barcelona (por el inicio de torneo que tuvo). Lo que debía hacer era reconocer todo lo realizado, analizar el asunto de la pretemporada y por qué el equipo había cambiado tanto de diciembre del 2016 a febrero pasado. Han retomado una línea. Descartarlo para ganar la primera etapa era imposible.

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Entrevista a Luigi Pescarolo Ycaza en Radio City:

Y respecto a los demás clubes, Delfín sigue andando bien; se estructura y basa todo en su idea defensiva y con dos hombres adelante que sí marcan una diferencia: Roberto Ordoñes y Carlos Garcés. Independiente se ha fortalecido y ha encontrado una nueva figura de juego, un nuevo modelo, con el técnico colombiano Alexis Mendoza. Y Emelec sigue siendo candidato. Tenemos un campeonato como no se veía hace mucho, con cuatro equipos que pelearán ese cupo al término de la fase.

Sobre qué equipo juega mejor, Barcelona tiene mes y medio de haber retomado cosas. A raíz del duelo con Atlético Nacional (triunfo amarillo 2-1 en Copa Libertadores) cambió mucho. Como que los futbolistas agarraron confianza. En ese partido los toreros jugaron al límite de sus posibilidades, para bien. Desde ese momento se siguió sosteniendo un ritmo de juego.

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Delfín tiene una estructura muy defensiva, de juego rápido y salidas exteriores. Emelec aún es un poco confuso en su propuesta, no sabemos cuál es su idea. Si la basa en el juego exterior, o en el volumen de juego interior. Independiente tiene algo más de posesión y de juego horizontal, más al estilo colombiano que lo presentaba en años pasados con un uruguayo. Son maneras y estructuras, pero en el balompié ecuatoriano es muy similar un equipo a otro. Tenemos un estilo y una idea y nuestros futbolistas respetan eso. Hay velocidad exterior y mucha dinámica en la media cancha porque los futbolistas tienen esas características. Nos falta posesión –aunque eso se ha ido ganando poco a poco–, buen manejo de pelota, que era algo pendiente. Nuestro estilo mejora con base en la calidad de los jugadores.

Sobre los jóvenes en Emelec, Carlos Moreno, Jordan Jaime, Segundo Portocarrero, entre otros, son futbolistas que necesitan recorrido, pero prefiero a Jaime que al peruano Cristhian Ramos. Si se va a traer extranjeros deben ser diferentes a lo que tenemos y ser aporte.

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Me parece bien que los jóvenes de Emelec tengan oportunidades. Los errores que cometen son producto de la (poca) cantidad de partidos en primera, y de la inexperiencia, muchas veces. Dicen “sí, pero ya tienen campañas jugadas”, pero una cosa es tener campañas como jugador regular de un plantel y otra ser titular indiscutible y asumir esa responsabilidad.

Estoy de acuerdo con Esteban Dreer en que hay fallas de los jóvenes de Emelec; concuerdo en que deben ir asentándose y mejorando. Pero discrepo con Dreer porque él está cometiendo muchísimos errores individuales hace rato. No le está dando seguridad a la zona defensiva.

Cuando un delantero mira atrás, y ve seguridad en su zaga y en su arquero, se siente cómodo para intentar cosas diferentes. Pero cuando sucede lo contrario, y mira atrás y su defensa y portero no le brindan confianza, también el atacante siente inseguridad. El fútbol es un deporte colectivo, de estructuras y de confianza en muchos casos, y Dreer no está brindado toda la confianza que necesitan los jóvenes en la zaga. (O)

Dreer está cometiendo muchísimos errores individuales hace rato. No le está dando seguridad a la zona defensiva. No está brindando toda la confianza que los jóvenes necesitan en la zaga.